Toyi Marcos Sosa

Desde mi ventana

Toyi Marcos Sosa


¡¡¡Y lo llaman convivencia!!!

15/10/2023

Desde que el presidente en funciones reparte cartas ganadoras al independentismo busco información sobre el tema. Lo intento como ciudadana de este país para poder digerir lo que todos conocemos como ruin precio a una investidura que separa a hijos de una misma madre: España, por exigencia repetida amnistía-referéndum. He topado con un esclarecedor escrito de Salvador Viada Bardají, fiscal del Tribunal Supremo titulado Amnistía a la carta en el que se dice: «El legislador constituyente no incorporó la amnistía a la Constitución porque en una democracia carece de justificación política y jurídica su aplicación a hechos delictivos relacionados con la agresión al orden constitucional». Así entiendo que no hay justificación ni sentido para que separatista alguno y adaptables refractarios gobiernen en una nación democrática, y... va a ser que sí. Cándido Méndez, secretario de UGT 1994-2016 y otros también, me han ayudado a ver tal imposición política y, a juzgar por cuantas exigencias exponen, no es que parezca, es que es algo que lleva a la 'esclavitud' al resto. Para resumir: es un pacto de naturaleza que acrecienta mucho más las desigualdades en lugar de erradicarlas en su relación con otras CCAA. Méndez dice: «La Constitución, en su art. 151, protege la lucha por la igualdad y el 155 impide que se conspire contra ella». Los pueblos luchan por la igualdad y no por un despótico poder político. La deslealtad del PSOE junto al separatismo margina al resto; sin debate despoja a millones de españoles bajo una dictadura de disfraz. Y para más inri, los catalanes exigen, mientras llegan sus muchas soberbias, el jugoso cupo vasco; Rodalies, el supuesto pago de la deuda histórica, el traspaso de las pensiones, ¡adiós Seguridad Social! Pues todo eso parece que depende de un hombre y su deseo compactado con los que pretenden reformas a la carta en el Código Penal, o si se quiere, de un Gobierno en clara ausencia de límites para llegar a lo más hondo de la degradación institucional. Sin olvidar a ciertos castellanos y leoneses a los que se ha confiado el voto y nos han dado la espalda como respuesta al tema. ¿Qué será lo próximo?