Carmen Casado Linarejos

Epifanías

Carmen Casado Linarejos


Las lenguas

24/09/2023

Son esos sistemas de signos con que las personas nos comunicamos y establecemos relaciones, tanto colectiva como individualmente. Es decir, la lengua que hablamos sirve para unirnos y para conformar sociedades y lazos entre nosotros. Pero también puede convertirse en arma incruenta que, mediante un uso torticero, enfrenta y separa. Los acontecimientos ocurridos durante la semana pasada en el Congreso de los Diputados son un claro ejemplo de cómo nuestra lengua común deja de serlo para ser el eje que divida. El pasado martes fuimos espectadores atónitos de un mal sainete que ni Muñoz Seca habría imaginado. Los parlamentarios españoles 'necesitaron' la ayuda de un traductor para comunicarse con sus vecinos de escaño y también españoles, mediante el uso de auriculares que escenificaran la desigualdad entre ciudadanos que se comunican entre sí en la misma lengua común: el español. Conscientes los separatistas del valor unificador de la lengua -el español- han obtenido un gran éxito al debilitar espectacularmente ese valor. Por eso persiguen su uso. Conocemos el egoísta motivo de Sánchez para aceptar el chantaje al que le somete descaradamente el delincuente prófugo. El presidente en funciones no teme contradecirse en asuntos graves en brevísimos periodos de tiempo siempre que le resulte útil. La gran contradicción no es, sin embargo, ese ridículo en que el Congreso de los Diputados se ha convertido, sino que es muy notable la perversión significativa que se atribuye al concepto 'progreso'. ¿ Cómo puede llamarse 'progresista' a un retroceso de seis siglos en el uso de la lengua?. Los que defienden tal extravagancia ponen el acento en lo bueno que es hablar varias lenguas y, por ello, es muy positivo que en el Congreso se hablen todas ellas. Eso es no entender nada. Esta farsa no tiene nada que ver con conocer distintos idiomas, ni con el derecho a utilizarlas ya bien reconocidos en España. Se trata de mostrar el poder creciente de los separatistas y de humillar a los españoles que hablamos español al evidenciar que deja de ser nuestra lengua común y su universalidad.