Hoy voy a hablaros del principal problema que, a mi juicio, tiene nuestra capital. Palencia es una ciudad amable para vivir, sin problemas de contaminación, movilidad o inseguridad ciudadana, pero que sufre una dinámica de pérdida de habitantes y envejecimiento de la población derivada, fundamentalmente, de su escasa capacidad de creación de empleo. Es algo que se ve, se siente, se respira. De hecho, hace unos días fui a correos y en mi caminar de ida por la calle Mayor conté más personas mayores con movilidad reducida que niños llevados por sus padres en cochecitos o sillitas, y de vuelta me fijé en la cantidad de locales vacíos que tenía la principal arteria comercial de la ciudad. Dos caras de la misma moneda.
Sí, es evidente que Palencia crea poco empleo, pero... ¿cuánto de poco? ¿Es tan grave la situación? Es que en los últimos años no he escuchado a nadie, y mucho menos a ningún político municipal en el gobierno o en la oposición, nada relevante al respecto más allá de vaguedades conocidas por todos. Lamentable, porque sólo cuando se conoce la magnitud de un problema se está en condiciones de abordarlo con eficacia.
Para responder a esa pregunta, como la Encuesta de Población Activa sólo facilita información desagregada a nivel provincial, se necesitan los datos de afiliación a nivel municipal que proporciona la web de la Seguridad Social. En este sentido, entre diciembre de 2011 y diciembre de 2023, los doce años de mandato directo o indirecto del PP en el Consistorio capitalino, Palencia ha pasado de 32.183 a 34.335 afiliados a la Seguridad Social, una creación de 2.152 empleos netos. ¿Y eso es mucho o es poco? Es poquísimo. Supone un crecimiento del 7%, lo que la convierte en la tercera capital de España donde menos ha crecido el empleo, sólo por encima de Oviedo y Zamora. De hecho, de cada 10.000 empleos generados en España en ese período, sólo 6 corresponden a nuestra capital. Desolador.
Esperaba que el nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento fuera consciente de la gravedad de este problema, y que el presupuesto 2024 aprobado la semana pasada reflejara un cambio de actitud al respecto. Pero no, no ha sido así. Es un presupuesto decepcionante en ese sentido, y de ello escribiré en mi próximo artículo.