José Javier Terán

El rincón palentino

José Javier Terán


En la recta final

13/11/2024

Ahora que andamos enfilando ya casi casi la recta final del año -porque pasando esta segunda quincena de noviembre, diciembre, con sus «puentes» y sus celebraciones festivas, será visto y no visto-, quizás nos venga a la mente aquellos deseos tan sinceros de paz, progreso y bienestar para todos, que pronunciábamos por doquier en nuestros brindis de bienvenida al año nuevo, a éste 2024, nada más y nada menos.
Pero como hemos visto a lo largo de los meses pasados, no ha podido ser el ver cumplidos estos deseos; antes al contrario, han quedado trastocados y hasta desbaratados por todas las esquinas, llegando incluso a límites difícilmente imaginables en los tiempos que corren.  Porque, lo de la DANA de Valencia no tiene nombre. 
Y, ¡lo que se han complicado todas las cosas!.  Tanto a nivel mundial, con esas tensiones geopolíticas y esas interminables guerras de Rusia y Ucrania o de Israel y Palestina e incluso Líbano e Irán; como ha ocurrido también aquí en nuestro país, a nivel más cercano y que tan bien conocemos, en el aspecto político y de gobernanza del país.   Porque, últimamente, cada día nos venimos acostando con la misma cantinela, y nos levantamos al día siguiente con una muy parecida, o si, acaso, corregida y aumentada en cuanto a términos absolutos y de implicación de más personas.  Y sin visos prometedores de tener un arreglo de manera inmediata, tanto en el orden internacional como en el nacional.
Porque, en el caso de nuestro país, la crispación política es de tal calibre que cada día parece romper nuevas barreras; con lo que gobernar en sí y sacar adelante nuevas leyes por y para la ciudadanía en general, aumentando su bienestar y protegiendo sus derechos, cada día va a menos.  
Por lo que ya nadie habla de grandes proyectos nacionales sobre los que pueda discutirse y sacar adelante en el Parlamento; sino que cada día las sesiones en esta Institución se convierten en un continuo lanzarse insultos e improperios los unos para con los otros, sin nada claro que negociar al final de estas sesiones parlamentarias. 
Y los ciudadanos lo estamos sufriendo con cara de asombro desde hace bastante tiempo ya.