La exposición El fuego de la conciencia, que hasta el próximo 17 de febrero puede visitarse en el vestíbulo de las Cortes de Castilla y León, conmemora los 25 años de El hereje, de Miguel Delibes. Pueden verse alrededor de 150 piezas (pinturas, documentos, libros, esculturas, mapas, tapices, obras de artes decorativas, obras artísticas y objetos de la vida cotidiana de la época), aportadas por 40 museos (Prado, Nacional de Escultura, Arqueológico Nacional, Lázaro Galdeano) e instituciones.
Palencia está presente en la muestra a través de dos obras, prestadas por la catedral y la parroquia de Santa Eulalia de Paredes de Nava. Así, la seo ha prestado el tapiz La Redención, de comienzos del siglo XVI, realizado en Bruselas hacia el año 1520 siguiendo un grabado de Lucas Cranach con la teoría luterana de la salvación solo por la fe y no por las obras.
Por su parte, la parroquia de Santa Eulalia ha cedido para la citada exposición Virgen con el Niño, popularmente conocida como La Virgen guapa, realizada por el gran escultor paredeño Alonso Berruguete hacia 1530.
Palencia presta dos obras a la muestra sobre 'El hereje' - Foto: DPLas dos obras prestadas encajan en el momento histórico, el siglo XVI, en el que se desarrolla la novela de Delibes y contribuyen a que el relato expositivo sea comprendido por el visitante. Por otra parte, cabe recordar que Valladolid, ciudad clave y protagonista en El hereje, pertenecía en ese tiempo a la diócesis de Palencia.
El fuego de la conciencia se divide en dos grandes partes. La primera se centra en Delibes y la segunda en las obras que le inspiraron a escribir El hereje, una publicación que le llevó tres años y que se nutrió de la historia de los heterodoxos españoles de Menéndez Pelayo y la «reconsideración» de los herejes españoles en la historia. El segundo bloque es el más extenso y se divide, a su vez, en tres ámbitos: personajes y momento de la obra; vida social, económica, administrativa y médica de esa época; y fuego desde la idea de su poder purificador y castigador.