El Congreso empieza a coger velocidad de crucero y esta semana vivirá intensas jornadas parlamentarias. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, regresa el próximo miércoles al estrado de la Cámara Baja, investido ya como jefe del Ejecutivo, para debatir con el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, con quien todavía no ha cerrado una fecha de reunión y bajo un clima de creciente tensión después de que la ley de amnistía haya iniciado su trámite y tras el apoyo de los socialistas navarros a Bildu para hacerse con la Alcaldía de Pamplona.

El PSOE insistió ayer en meter prisa al jefe de la oposición para verse con el presidente en la Moncloa. De hecho, la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, le pidió «respetar» las instituciones, porque considera que es un deber «fundamental» para los servidores públicos, «empezando por la Presidencia del Gobierno». «Cuando el presidente del Gobierno llama a alguien para que vaya a la Moncloa, se va. Y Feijóo ya está llegando tarde. Es de primero de democracia», reflexionó para afearle que, de momento, haya ignorada las propuestas para encontrarse con el líder socialista.

Sánchez acudirá al pleno de la Cámara con el objeto de comparecer a petición propia y también del PP para dar cuenta de los últimos consejos europeos -sobre la presidencia española del Consejo de la UE y en torno a la guerra de Gaza-, aunque a nadie se le escapa que será la política interna, y en especial las cesiones al independentismo catalán y vasco, la que centrará la contienda.

El primer cara a cara entre Sánchez y Feijóo, formado ya el nuevo Gobierno, se produce con la ley de amnistía encaminada y con visos de que su debate de enmiendas a la totalidad se produzca la segunda semana de enero, tras la celebración de la festividad de Reyes.

Un tema que si ya había encrespado al PP, que sigue avisando que hará todo lo posible por oponerse al borrado de los delitos al procés en el Senado como en los tribunales nacionales e internacionales, se suma al apoyo que los socialistas navarros han dado a EH Bildu para desbancar a la alcaldesa de UPN en Pamplona.

Feijóo llegará al Congreso tras haber participado en la manifestación contra la moción de censura a los regionalistas navarros y previsiblemente, volverá a echar en cara a Sánchez un pacto «miserable», «el pacto encapuchado» que considera que acordó el Gobierno con los abertzales como pago para mantenerse en la Moncloa.

El debate parlamentario, que se prevé encendido tanto por parte del PP como de Vox, se produce sin fecha de reunión entre Sánchez y Feijóo para hablar también del desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de la financiación autonómica. 

«Si las posibilidades de entendimiento no eran muchas, desde hoy son muchas menos», avisó Feijóo al conocer la moción en Pamplona.

El encuentro de Sánchez con el líder de la oposición está pendiente de cerrarse mientras que el jefe del Ejecutivo se reúne el jueves con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès y sigue en el aire otra cita que Junts da por hecha: la apalabrada con el fugado Carles Puigdemont.