La presidenta de la Diputación y del Consorcio para la gestión turística del Canal de Castilla, Ángeles Armisén, se puso ayer en contacto con la Confederación Hidrográfica del Duero y lo hará próximamente con la Subdelegación del Gobierno en Palencia, para reclamar información sobre la afección al Canal de Castilla de las obras de construcción de un viaducto para la Línea de Alta Velocidad a Cantabria.
«Si esa obra está autorizada, que lo estará, como mínimo hay que informar a la población y a los ayuntamientos, sobre todo, cuando está afectando al Canal de Castilla», aseveró ayer a este periódico Armisén, que recordó que tanto las obras de la infraestructura ferroviaria como la titularidad del canal recaen sobre el Gobierno de España.
Por ese motivo, anunció que en los próximos días dirigirá una carta al subdelegado del Gobierno «pidiéndole explicaciones e información» para trasladársela tanto a los consistorios de Frómista y Boadilla del Camino como a las asociaciones vinculadas al Canal de Castilla, como es el caso del Consorcio para la gestión turística que ella preside o de la Asociación de Municipios Ribereños.
Armisén no dudó de que esta actuación, incluida en el proyecto del AVE a Cantabria, tendrá su autorización correspondiente, «pero, sinceramente, debería haber habido una información previa de las obras a realizar y de cómo afectaban al Canal».
«Agresión». La Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago denunció ayer la «agresión» que las obras del trazado del AVE Palencia-Santander causan al Camino de Santiago a su paso por el Canal de Castilla. En un comunicado publicado en su página web, la Federación llama la atención sobre los efectos de la construcción de un viaducto sobre el Canal entre las poblaciones de Boadilla del Camino y Frómista, «lo que podría ser un nuevo atropello al Camino Francés».
«En la imagen puede apreciarse cómo la línea por la que se prevé discurra el tren de alta velocidad pasa por encima del Canal de Castilla, y uno de los pilares previstos se sustenta por completo sobre el sendero por el que discurre el Camino de Santiago, en una de las etapas de mayor belleza por los campos de Castilla», alega la federación en su escrito.
Desde el colectivo sostienen que «tras tener conocimiento de esta situación, se harán las averiguaciones pertinentes y considerarán las medidas a tomar respecto a lo que, a toda vista, parece un nuevo atentando y falta de consideración a un espacio especialmente protegido por ser considerado Patrimonio de la Humanidad, como es el Camino de Santiago Francés, en este caso a su paso por el Canal de Castilla».
Diario Palentino mostró en su edición de ayer cómo una doble verja con una señal que prohibe la circulación de peatones es lo que se encuentran los peregrinos en el tramo que discurre entre las localidades de Boadilla del Camino y Frómista, tanto en un sentido como en otro. La parte de la ruta que discurre junto al Canal de Castilla y que es compartida tanto por los caminantes que se dirigen a Santiago de Compostela como por los que quieren llegar a Liébana, se interrumpe abruptamente, lo que obliga a los viandantes a desviarse por un camino paralelo.
La construcción de un viaducto sobre el Canal de Castilla para la línea ferroviaria, en un punto ubicado junto a la confluencia con el arroyo de los Rubios, se deja notar ya por la construcción de varias pilastras que sustentarán ese viaducto. Y, lo más llamativo, es cómo se ha ocupado el camino de sirga para hormigonar la base de uno de esos pilares que sustentarán el paso elevado sobre el canal.
Ese camino de sirga coincide con el Camino de Santiago y con el Camino Lebaniego hasta Cantabria, además de ser parte de dos de las rutas de Eurovelo, la gran red internacional pensada para el turista que viaja a lomos de su bicicleta.