La asociación de vecinos del barrio de San Pablo y Santa Marina está bastante contenta con la limpieza del barrio. «En principio nosotros hemos mejorado, es verdad que deberían de hacer una limpieza general sin tener que llamarles pero dentro de todo lo malo, ahora cuando les llamamos nos lo han limpiado» explican los vocales de la asociación Sergio de los Bueis y Óscar Martín. 

Tenían zonas bastante sucias y tras hablar con la empresa de limpieza se lo han adecentado. «La plaza de los Dominicos estaba hecha un asco; hablamos con ellos y nos lo hicieron, lo mismo que con los árboles de la plaza Mariano Timón que estaban muy grandes y sin podar y ya lo han terminado», cuenta de los Bueis.

Explica que «no es un barrio que tenga muchas explanadas, al final son cosas cotidianas que tan solo necesitan un mantenimiento. Si hicieran un plan cada seis meses, no tendríamos ningún problema».
Piensan que se podrían poner más contenedores y papeleras, pero «la gente debería de cuidarlo más. De nada sirve colocarlos y que la basura termine fuera, incluso con los contenedores vacíos».

Los soportales, en frente de la churrería de Jardinillos,  «necesitan una limpieza», aunque  al ser lugares privados de uso público no saben desde la asociación hasta qué punto los barrenderos tienen el convenio que les permite limpiarlo. Las aceras de esa misma calle también necesitan una limpieza porque «están llenas de hierbas, excrementos de palomas y suciedad» comentan algunos vecinos.

La bolera. En la parte trasera de San Pablo se encuentra la bolera que está en desuso. Desde la asociación piden que «se podría hacer un parque infantil, ya que el de Jardinillos se queda muy pequeño; es un barrio con muchos niños y ahora en verano se podría ir al que está a lado del río, pero en invierno solo con este parque es imposible». Además la bolera está entera estropeada «las baldosas están levantadas y rotas, está siempre llena de hojas y al barrendero siempre le cuesta mucho limpiar». Además, «cuando llueve resbala muchísimo  porque las piedras están pulidas de lo desgastadas que están» lamentan algunos vecinos del barrio.

De los Bueis también habla del estanque de los Jardinillos «aunque lo limpian frecuentemente, es un lugar que va a seguir ensuciándose bastante, por las hojas de los árboles y las palomas tampoco se puede controlar que no defequen. Lo que necesita es un sistema que drene para que el agua se renueve por si solo», subraya de los Bueis.

Por último piden un CEAS para poder hacer actividades. «Cuando lo necesitamos tenemos que ir a Fernández Nieto o San Juanillo. Así mucha más gente se acercaría a la asociación», destaca el vocal.

El gran problema  es la búsqueda de aparcamiento.El mayor problema que ven en el barrio es la búsqueda de un lugar de aparcamiento. «Es imposible crear más plazas porque no hay sitio y hemos notado que muchas no se usan bien», declara el vocal vecinal. 

En frente del Palacio del Obispo «hay algunas que no se están usando correctamente. La gente lo está empezado a ver e incluso está utilizándolas». En la calle Mayor Antigua les están llegando quejas del reservado que tienen las monjas. «Nosotros no decimos que no se concedan plazas sino que las que se acepten sea por una causa justificada.Si ya tenemos pocos sitios, nos quitan más, y luego encima no se usan», comentan ambos.

También hay plazas para personas con discapacidad que no se utilizan y vados que realmente no creen que sigan en vigor. «En la calle Las Monjas hay dos plazas de movilidad reducida que si se usan, pero hay una en una plaza interior que está en desuso, dos en el Palacio del Obispo, una para San Cebrián y la otra inutilizada, otra en la calle Los pastores, y en Los Guanelianos otras dos». «Al final son un montón de plazas que se podrían dar uso», declaran.

Por no hablar de los vados, «Muchos están pero ya no se pagan, lo que proponemos es que pongan un distintivo y el que no lo tenga que se pueda aparcar en esa plaza y no te multen» subraya, de los Bueis.