La Junta de Castilla y León busca consolidar las capacidades del sistema de investigación de la Comunidad, potenciar su excelencia y mejorar el posicionamiento internacional de los centros y universidades, potenciando la excelencia en áreas científicas para Castilla y León, tanto desde el punto de vista de impacto científico como desde el apoyo a los sectores económicos más competitivos. De ahí que una de las apuestas del Ejecutivo autonómico haya sido la captación de jóvenes investigadores, que se demuestra en que los contratos predoctorales de cuatro años de duración máxima se dispararan el año pasado un 32,3 por ciento, al pasar de los 261 existentes en 2022 a los 345 vigentes en 2023.
El informe de la situación económica y social de Castilla y León, elaborado por el CES y consultado por la Agencia Ical, destaca que la cifra total de contratos predoctorales de cuatro años de duración máxima a departamentos o institutos de universidades públicas o de privadas sin ánimo de lucro, organismos públicos de investigación, infraestructuras científico-técnicas singulares y fundaciones de investigación del ámbito sanitario, con sede en la Comunidad, aumentó en 2023 un 32,3 por ciento, con 84 más. Por su parte, el incremento del presupuesto fue inferior, del 23,9 por ciento, hasta los seis millones frente a los 4,8 millones del ejercicio anterior.
La mayor parte de los 345 contratos predoctorales vigentes en 2023 correspondió a la Universidad de Salamanca (Usal), hasta el punto que acaparó el 40 por ciento, al sumar 140. Le siguió, a mucha distancia, la Universidad de Valladolid (UVa), con 74; la de Burgos (UBU), con 44, y la de León (ULE), con 42 contratos. El reparto se completó con los 36 existentes en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), los ocho del Instituto de Estudios de Ciencias de la Salud y una para la Fundación para la Investigación del Cáncer de la Usal
Según los datos aportados por la Consejería de Educación al Consejo Económico y Social, la Universidad de Salamanca es la que concentra el mayor presupuesto, 2,5 millones, frente a los 1,2 millones de la UVa.
Estas ayudas para la contratación predoctoral están cofinanciadas por el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) para la incorporación de jóvenes investigadores. A fecha de cierre del informe, estaba pendiente de resolución la última convocatoria, publicada en diciembre de 2023, con 90 nuevas ayudas en concurrencia competitiva, que deberían sumarse a las vigentes en 2023.
En este sentido, Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes denunció la semana pasada que la Consejería de Educación había incumplido el plazo de resolución de la convocatoria para adjudicar esas 90 plazas de contratos predoctorales, después de que el 2 de agosto finalizaran los seis meses sin la resolución. En este sentido exigió que no se desestimen las solicitudes, correspondientes al año 2024, además de doblar el presupuesto para llegar al máximo número de jóvenes investigadores, siempre y cuando cumplan los requisitos y así puedan realizar sus tesis doctorales.
100 técnicos de apoyo
Además, hay ayudas para financiar la contratación de personal técnico de apoyo a la investigación en las universidades públicas de Castilla y León durante dos años. En junio de 2023, se publicó la última convocatoria que se resolvió con la concesión de cien ayudas (20 más que en la anterior edición). De ellas, 35 estuvieron destinadas a jóvenes con título universitario y 35 a titulados de Formación Profesional.
La Consejería de Educación también cuenta, gracias a la cofinanciación de los fondos Feder, con una línea de subvenciones para la realización de proyectos de investigación en ciencia aplicada para investigadores postdoctorales, con una duración de hasta tres años y medio. Al cierre del informe del CES, aún no estaba resuelta la última convocatoria, que data de noviembre 2023. Eso sí, aún se mantenían activos 103 proyectos, a los que se dedicó 3,1 millones, un 165 por ciento más que en 2022.