El presidente de la Confederación de Comercio de Castilla y León (Conferco), Adolfo Sainz, lamentó que una cuarta parte de los comercios de la Comunidad, bajó sus persianas en la última década y "cada vez se ven más locales con el cartel de cerrado".
El dirigente comercial hizo balance de la temporada y constató una primavera "muy mala, porque no ha hecho calor y no se ha vendido, sobre todo ropa, en el textil". "Nos está afectando el cambio climático", dijo. Asimismo, comentó que intentarán durante las próximas rebajas de julio, vender "todo lo que puedan" porque "las tiendas están llenas y serán muy atractivas", aunque todo dependerá del tiempo, según recoge Ical.
Sainz presentó una campaña de la Confederación Española de Comercio, que intentará poner en valor al comercio de proximidad ante la sociedad en general y los jóvenes en particular, frente a las nuevas fórmulas de "lejanía", como "sector estratégico" por su contribución social, como dinamizador de la economía y el empleo, garante de la sostenibilidad y capacidad para fijar población, informa Ical.
Adolfo Sainz puso de relieve el peso de este sector que cuenta con 30.000 puntos de venta en Castilla y León y 130.000 trabajadores; y genera el diez por ciento del PIB regional, y ensalzó la campaña "en positivo" que financia la Secretaría de Estado de Comercio, con vídeos, redes sociales y cartelería, donde se resalta su carácter "cercano, humano, fresco y sostenible".
Una medida "extraordinaria" bajo el lema 'Principios para recuperar los principios', que es, dijo "original, juvenil, alegre, positiva y vitalista" en la que se habla de las cualidades del pequeño comercio. La presentación se celebró en la sede de la Agrupación Vallisoletana de Comercio (Avadeco), con su presidente, Rafael Monedero, junto al secretario general de la Confederación Española de Comercio, Julián Ruiz.
Adolfo Sainz apeló a los jóvenes para que compren en el pequeño comercio y constató que se trata de unas actividades "muchas veces escondidas de las que no se habla" por lo que exigió que se introduzcan "en la agenda pública y política", por su carácter esencial par la vida en ciudades y pueblos.
Ciudades cada vez más vacías
Rafael Monedero reconoció que se está produciendo un cambio en las formas de consumo y abogó por conciencias a la gente para que consuma cerca para que sus gastos repercutan en la economía y la sociedad de sus ciudades, no "fuera". "Las ciudades cada vez están más vacías de contenidos", denunció, para defender que es el comercio urbano, el cercano, el que es sostenible, y apostó por "reavivar el corazoncito de los clientes para que compren en el pequeño comercio".
Por su parte, Julián Ruiz insistió en que el pequeño comercio constituye un "sector absolutamente estratégico" y comentó que la campaña está dirigida a provocar un "ejercicio de reflexión y concienciación" sobre todo a los jóvenes, pero también a toda la sociedad, para "redescubrir ese comercio de proximidad, comprometido con los principios sociales, económicos y medioambientales".
Precisó que este sector está integrado por 394.000 empresas en España, el 12,3 por ciento total, con 520.000 establecimientos, 13,3 por ciento. Agregó que el 46 por ciento son empresas unipersonales; hasta un 83 por ciento tiene hasta dos asalariados; y un 95 por ciento, menos de seis. En Castilla y León, el 97,6 por ciento, 20.000 empresas, estaría en el tramo de menos de seis trabajadores.
Ante estos datos, defendió que "debería ser una prioridad impulsar políticas para dinamizar ese ecosistema empresarial", sobre todo en estos "momentos delicados", con altos costes, y claras desventajas competitivas frente a otros operadores, y la desaparición de 50.000 autónomos del sector los últimos cinco años.
Asimismo, constató que cada vez les aprietan con más impuestos, pero esos tributos al final "se quedan aquí", dijo, porque "no sabemos dónde acaban con otros formatos comerciales". "Debemos poner énfasis en sus contribución social y económica y su capacidad para fijar población", resumió, para sentenciar que el comercio de proximidad es una "apuesta segura y una garantía en los momentos más críticos, como en pandemia" y solo se podrá abordar su futuro desde la cooperación público-privada.