Trajes de época, un séquito de soldados y la emoción por la llegada del rey Carlos V a la villa galletera marcaron la estampa de ayer en Aguilar de Campoo.
Como si de un auténtico viaje en el tiempo se tratara, los vecinos de la localidad se vistieron de gala para recibir al monarca, quien partió sobre las 12,30 horas desde el Ayuntamiento hacia la Puerta de Reinosa para saludar a los vecinos allí congregados. Después, se dirigió hasta la plaza de España, donde fue recibido solemnemente por los marqueses de Aguilar.
Esta representación busca escenificar el histórico encuentro que se produjo en la villa en el siglo XVI entre los nobles ayer representados, una jornada que, más allá de mantener en la memoria el significativo hecho, se ha convertido con el paso de los años en una de las citas culturales más señaladas en la comarca.
Antes de la llegada del rey y para dar un ambiente más medieval a la cita, por la mañana se llevó a cabo la inauguración del mercado de época y una exhibición de tiro con arco. Talleres tradicionales, animación por las calles, juglares y trovadores abrieron la programación antes de que llegara el hijo de Felipe I de Castilla.
La jornada continuó con una serie de actividades en las que la música medieval, los trajes de época y el tinte histórico fueron los denominadores comunes. Así las cosas, durante la tarde tuvo lugar un desfile renacentista que recorrió las calles del municipio.