El presupuesto de Castilla y León para el año 2025 está quemando ya las últimas etapas antes de su presentación y el Consejo Económico y Social ya tiene en sus manos la Ley de Medidas Tributarias, Financieras y Administrativas. El 'hermano menor' del proyecto de Ley de presupuestos, conocido comúnmente como Ley de medidas de acompañamiento, contempla para el próximo ejercicio un nuevo paquete de rebajas fiscales, el quinto de la 'era Mañueco', con el que el Gobierno autonómico quiere elevar hasta 38 las veces que ha tocado a la baja los impuestos y tasas durante los últimos cuatro años. «Mantenemos una apuesta por una política fiscal moderada y justa», resumió el portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, tras el Consejo de Gobierno.
Cuatro son los retoques fiscales que incorpora el texto que ya está en manos del CES, y que después tendrá que pasar también por el Consultivo antes de debatirse en el Pleno. La principal es la rebaja –ya anunciada por Alfonso Fernández Mañueco en el Debate sobre el Estado de la Comunidad– se centra en el tramo autonómico del IRPF, que bajará del nueve al 8,5%. Esta medida beneficiará a «todos» los contribuyentes de Castilla y León, con un ahorro de unos 70 euros por persona, y situará a la Comunidad como la segunda con el tipo más bajo de España.
El texto también incluye la creación de un tipo superreducido del 3% en la adquisición de viviendas para jóvenes cuyo precio sea inferior a 150.000 euros; el incremento del 15 al 20% de la deducción para la rehabilitación de viviendas en el medio rural; y la ampliación de los beneficiarios del impuesto de sucesiones y donaciones, para que la reducción del 99 por ciento de la base imponible afecte también a la adquisición de explotaciones agrarias.
El consejero de Hacienda defendió que estas rebajas fiscales no tienen porque restar la recaudación, y señaló que «un mayor estímulo al ahorro y al gasto que tiene, como efecto secundario, el pago de otros tributos». Tampoco se olvidó del Gobierno de España, y recordó que mientras la Junta ha rebajado 38 veces los impuestos en cuatro años, el Ejecutivo central los ha subido en 69 ocasiones.
Apoyo de los grupos
En cualquier caso, para que estas nuevas medidas vean la luz, será necesario que la Junta y el Grupo Popular que lo sustenta en las Cortes consigan los diez votos que necesitan para alcanzar la mayoría absoluta que de luz verde al presupuesto de 2025. Para ello avanzó que mirarán a los partidos «propensos a bajar impuesto», como Vox, y confió en que «no dependan de Madrid».