La Ruta del Vino de Jumilla, situada entre el nordeste de la Región de Murcia y el sureste de la provincia de Albacete, se constituyó como tal en 2005 y discurre por un territorio de tradición vitivinícola milenaria, constatada desde época ibérica, aunque se han hallado en excavaciones restos de vides y parras de más de 5.000 años de antigüedad.
El proyecto arrancó con el municipio que da nombre a la D.O.P. Jumilla, pero entre 2019 y 2021 se integraron cinco localidades de la provincia albacetense: Hellín, Tobarra, Ontur, Montealegre del Castillo y Fuente Álamo.
Como coordinadora de la Ruta del Vino de Jumilla, Marta González, destacaba las particularidades que hacen de ella una experiencia única para los amantes del enoturismo. «La Ruta del Vino de Jumilla es la asociación de bodegas, restaurantes, bares de vino, alojamientos, enotecas, comercios especializados, almazaras, empresas de ocio temático, y museos, que se unen en torno a la cultura del vino de la comarca natural que conforma la D.O.P. Jumilla; es una de las rutas más antiguas de España y pionera en Castilla-la Mancha, formando parte del club de producto Rutas del Vino de España desde 2005. El objetivo de su creación responde a la creciente demanda del enoturismo en este territorio de visitantes de toda España y un notable número de visitantes extranjeros», asegura.
Museo del Vino Hacienda del Carche, en el término municipal de Jumilla - Foto: R.V.J.«Se trata de una ruta en plena expansión -continúa González-, que ofrece una amplia oferta turística y múltiples actividades, eventos y experiencias en torno al mundo del vino durante todo el año. El visitante tiene la posibilidad de sumergirse en la cultura, tradición y costumbres locales. Pasear por un viñedo, visitar una bodega y conocer el proceso de elaboración del vino, alojarse en un entorno rural, tomar un buen vino D.O.P. Jumilla y degustar la gastronomía local, sin olvidar la oportunidad de conocer el patrimonio histórico, cultural y natural que ofrece la comarca».
Marta González subraya que «es un territorio con un profundo arraigo en la tradición y cultura vitivinícola, donde reina la variedad de uva monastrell (el 80%), que da lugar a vinos mediterráneos de gran personalidad, reconocidos en todo el mundo». La zona comprende 22.700 hectáreas de viñedos repartidos entre Murcia y Albacete.
Vista del Tolmo de Minateda.©Turismo Castilla-La Mancha- David Blázquez
Los municipios
Situada en el norte de la región de Murcia, en la comarca del Altiplano, Jumilla tiene su origen en la Edad del Bronce, como así lo demuestran los vestigios que aparecieron en la cima del Cerro del Castillo, cima donde se crea el núcleo original de la población y que posteriormente fue habitada por iberos, romanos y árabes. Dentro del conjunto histórico-artístico, destaca su iglesia de Santiago (siglo XV), con bóveda gótica y un magnífico retablo del siglo XVI, la Plaza de Arriba, donde se desarrolló la vida política y económica del siglo XVI o el Casón, el mausoleo funerario tardorromano mejor conservado de Europa. Entre sus Fiestas destacan la Fiesta de la Vendimia y la Semana Santa de Interés Turístico Internacional.
Vista panorámica de Jumilla, con su castillo en primer término. R.V.J.
Hellín, el municipio con mayor número de habitantes de la Ruta del Vino de Jumilla, fue un núcleo de población ya habitado en el Paleolítico, de hecho a ocho kilómetros se localiza el Tolmo de Minateda, uno de los parques arqueológicos de Castilla-La Mancha, con huellas de poblamiento desde la Edad del Bronce hasta la Edad Media. Cabe destacar el Abrigo Grande de Minateda, uno de los más importantes del arte levantino con pinturas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, junto con sus famosas Tamboradas. Además de su rico patrimonio natural donde sobresale el volcán de Cancarix, es parada obligatoria el Museo de Arte Contemporáneo Picornell y el Museo de Semana Santa y Tamborada (MUSS).
A algo más de 10 kilómetros al Norte se sitúa Tobarra, municipio especialmente conocido por su Semana Santa y la Tamborada, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Posee un rico patrimonio natural y cultural donde hay que destacar la iglesia de la Asunción, con la esplendorosa Dolorosa de Salzillo o la ermita de la Encarnación y del Cristo de la Antigua, ambas declaradas Bienes de Interés Cultural. Además, el Museo del Tambor, su señera gastronomía con platos típicos como el famoso atascaburras o sus excelentes carnes contribuyen a completar su oferta enoturística.
Ontur es un municipio situado al sureste de la provincia de Albacete con cerca de 2.000 habitantes. Es muy recomendable la ruta natural por la parte norte de la Sierra del Madroño, donde se localiza el merendero con un mirador, una fuente de agua natural y una pinada. En cuanto a su gastronomía, el arroz con pollo y conejo, las gachas de mataero, las migas y los gazpachos manchegos así como los refrescantes mojetes en verano no dejaran indiferente a nadie. Ontur es famoso por el descubrimiento de las muñecas romanas en una tumba infantil de la necrópolis de las Eras de Ontur. Otro atractivo importante del municipio son las instalaciones del aeródromo, al pie de la Sierra del Madroño, centro regional de los deportes aéreos.
Fuente Álamo es otro municipio asociado a la Ruta del Vino Jumilla. Situada al norte de la comarca Campos de Hellín, limitando con Almansa, cuenta con una importante base económica proveniente de la agricultura, especialmente viñedo, almendro y olivar. Destacan sus fiestas patronales en honor a San Dionisio Areopagita en octubre. En cuanto al patrimonio visita obligada es la iglesia de San Dionisio Areopagita, construida en el siglo XVIII de estilo neoclásico; Las Colleras, una serie de hendiduras geológicas en estratos calizos que reciben el nombre popular de Toriles, donde se han encontrado habitaciones neolíticas; y, por supuesto, el Cerro Fortaleza, con restos neolíticos, celtíberos y romanos.
Finalmente, Montealegre del Castillo, al sureste de la provincia de Albacete, se caracteriza por su rica historia destacando la huella que han dejado los íberos. Muestra de ello es el Cerro de los Santos», yacimiento que data de los siglos III al siglo I a. C. donde se halló la famosa Dama Oferente. Sus fiestas patronales se celebran a mediados de agosto en honor de la Virgen de la Consolación, donde destaca la romería de la Virgen al municipio desde el Santuario de Nuestra Señora de la Consolación. Otras paradas obligatorias son los Arcos del Molino, la calzada romana, el castillo, la iglesia de Santiago Apóstol o la Cruz del Humilladero.
Instalaciones de las Bodegas San Dionisio en Fuente Álamo. B.S.D.
Una fiesta de Interés Turístico Internacional
La Semana Santa de Hellín y sus tamboradas con una de las tres fiestas de Interés Turístico Internacional reconocidas en la provincia de Albacete, celebración también declarada por la Unesco patrimonio inmaterial de la humanidad en 2018. También los ciclo pasionales de Jumilla y Tobarra tiene una especial importancia dentro de la zona y tienen un reconocimiento de Fiesta de Interés Turístico Nacional. La tamborada de Hellín es una de las fiestas de carácter etnológico más señaladas de España y se caracteriza por el toque intenso y continuado del tambor de forma simultánea y colectiva, en un amplio espacio público urbano. Esa tradición también se vive con intensidad en la vecina Tobarra y en Jumilla.
Precisamente esta localidad murciana celebra a finales de octubre su Feria del Vino DOP Jumilla y del Enoturismo, con más de 40 actividades, como catas, degustación de vinos y rica gastronomía, actuaciones musicales y visitas turísticas. Más adelante, del 1 de noviembre a 1 de diciembre, el visitante puede dejarse seducir por la exquisita oferta enogastronómica local en sus XVIII Jornadas Gastronómicas donde se puede disfrutar de una selección única de restaurantes y bares de vinos de la comarca.