El viento protagonizó ayer varias imágenes impactantes en España con la llegada de la borrasca Kirk. Los efectos del fenómeno meteorológico, que mantenía en alerta a gran parte de la Península, se dejaron sentir en varios puntos de España, provocando una multitud de incidencias e importantes daños materiales, incluso algunos heridos leves.
Las fuertes corrientes de aire se registraron, especialmente, en el norte del territorio nacional, con rachas de hasta 205 km/h en los picos de Europa (Cantabria), aunque también en zonas de montaña como, por ejemplo, en Valdezcaray (La Rioja) con hasta 165 o los 145 kilómetros por hora en La Covatilla, en la provincia de Salamanca.
Pero fue sobre todo Galicia la región que más sufrió el paso de la borrasca. Hasta 72 litros por metro cuadrado de precipitación se recogieron tanto en el aeropuerto de Santiago de Compostela como en Vigo, en un tramo de 12 horas.
Galicia registró un importante reguero de incidencias. - Foto: Carlos castro (europa press)La llegada de Kirk hizo aflorar la fragilidad y que fuesen visibles todos los desperfectos ocasionados en la capital gallega, repleta de balsas de agua y azotada por un fenómeno meteorológico que dejó varios destrozos en el mobiliario urbano en lo que fue un día bastante revuelto.
Aunque el mayor número de incidencias en la región (más de 1.300 según la central de emergencias, al cierre de esta edición) estuvieron asociadas a desprendimientos e inundaciones. También al suministro eléctrico, con cortes que afectaron a más de 20.000 personas. Los desplazamientos también se vieron condicionados en esta comunidad, provocando una situación caótica en carretera y a nivel ferroviario, ya que en este último la circulación en varias líneas entre La Coruña, Vigo, Pontevedra o Redondela tuvo que ser interrumpida durante algunas horas. En lo que respecta al apartado aéreo, Air Europa decidió anular ayer algunos vuelos entre Madrid y Vigo, situación que también afectó a la ruta entre la capital y La Coruña. En el aeropuerto de Loiu (Bilbao), por otra parte, se registraron más de 30 cancelaciones y varios desvíos, al igual que sucedió en Cantabria.
El temporal, además de importantes daños materiales, dejó hasta ocho personas heridas leves en distintas zonas de Castilla y León. También en Galicia una joven de 25 años tuvo que ser atendida tras caerle encima la copa de un árbol en Vigo, aunque no necesitó ser trasladada a un centro hospitalario.