El consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, recalcó hoy que la atención y la defensa de la víctimas del terrorismo es una "noble misión" que para la Junta de Castilla y León se ha convertido en una "prioridad absoluta" y en un compromiso con la memoria, la dignidad, la justicia y la verdad.
González Gago, en su discurso de inauguración de las I Jornadas I Jornadas Autonómicas sobre Terrorismo en Castilla y León, que se celebran en la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid, aseguró que las víctimas del terrorismo son el testimonio más valioso de la historia democrática de España, a la vez que destacó que su sufrimiento representa, "no solo el dolor personal", sino también un ataque directo a la libertad, la justicia y la paz.
El consejero insistió en el compromiso "firme e inquebrantable" que Castilla y León, la segunda comunidad más golpeada por ETA con 149 asesinatos, ha asumido con la atención a las víctimas, la protección de su dignidad y la preservación de su memoria.
En este sentido, hizo referencia a la Ley de reconocimiento y atención a las víctimas del terrorismo de Castilla y León, aprobada en 2017, de la que señaló que recoge un conjunto de medidas de protección para otorgar la cobertura necesaria y dar respuesta a las necesidades de la víctimas, poniendo de relieve el valor que merece su sacrificio y su entrega.
No obstante, González Gago apuntó que más allá de la normativa vigente y en consonancia con los principios básicos de justicia, solidaridad y respeto a los derechos humanos, la defensa de las víctimas constituye un deber ético para la sociedad en su conjunto y para las administraciones. "Debemos apoyarlas y trabajar incansablemente para que su tristeza encuentre consuelo, sus derechos estén plenamente garantizados y se honre su memoria con dignidad y respeto a la verdad", afirmó.
Aunque enumeró algunas de las ayudas de la asistencia integral que ofrece que recoge la normativa autonómica, se mostró convencido de que la asistencia a las víctimas del terrorismo no puede ser solo una cuestión económica y sí un posicionamiento firme de respeto, reconocimiento y reparación. "Nuestro deber como administración es situarnos en el lado correcto de la historia y conceder a nuestras víctimas el amparo necesario ante la injusticia sufrida", aseveró.
Por otra parte, con relación al papel de los medios de comunicación, el consejero reclamó un tratamiento informativo riguroso, ético y respetuoso hacia las víctimas, tal y como siempre se ha promovido desde el Colegio de Periodistas de Castilla y León. "Las historias de sufrimiento y valentía tienen que ser contadas con objetividad y respeto, sin tropezar en el sensacionalismo y, mucho menos, dejar que su recuerdo caiga en el olvido", indicó.
En su intervención también puso en valor el papel de la Asociación de Víctimas del Terrorismo de Castilla y León y afirmó que su labor de representación, acompañamiento y reivindicación es un pilar fundamental para la construcción de una sociedad más justa.
Referentes éticos
En la inauguración de las jornadas, organizadas por organizadas por la Asociación de Víctimas del Terrorismo de Castilla y León (AVTCyL) y el Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, también participó el vicepresidente de la Diputación de Valladolid, Víctor Alonso, quien destacó que las víctimas del terrorismo son los referentes éticos del sistema democrático, la vez que reclamó que no se olviden el dolor y la injusticia que generó el terrorismo, por lo que demandó a la sociedad y a las administraciones que sean diligentes a la hora de velar por su dignidad.
Por su parte, el presidente de la AVTCyL, Sebastián Nogales, reclamó a la Junta que se desarrolle por completo la Ley de reconocimiento y atención a las víctimas del terrorismo de Castilla y León, para que se convierta en un referente nacional.
Mientras tanto, el decano del Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, Pedro Lechuga, argumentó que la labor del periodista es contar lo que pasa a su alrededor y, sobre todo, "lo que muchos no quieren que se cuenten", a la vez que recalcó que en el caso del terrorismo contar la verdad es un deber con las víctimas.