En un mundo en el que la tecnología lo invade todo, echar mano del papel conlleva ciertas ventajas como esa indescriptible sensación de hojear un libro nuevo, el olor a la tinta del periódico o recorrer el mundo mapa en mano sin preocuparse de la cobertura del teléfono móvil.
Tomando este último ejemplo como punto de partida, el Instituto Geográfico Nacional (IGN) acaba de actualizar el mapa de la provincia. Una edición renovada en la que se incluyen los nuevos tramos de autovías y la línea del AVE (incluso algunos tramos de la futura conexión con Cantabria) en una cartografía en la que se han empleado tintas con tonos más oscuros para la Montaña Palentina (poniendo así el foco en su orografía) y se destacan algunas de las zonas de regadío más significativas del territorio palentino. A su vez, se han mejorado las toponimias fruto de un trabajo de investigación en documentos históricos.
ESCALA 1:200.000
El Instituto Geográfico Nacional ha elaborado el documento en cuestión a escala 1:200.000, es decir, que cada centímetro del mapa equivale a dos kilómetros. La imagen identificativa para esta ocasión es el Canal de Castilla, concretamente la esclusa triple de Calahorra de Ribas. Además, señalar que este es el séptimo de Palencia que ve la luz, remontándose el primero de ellos a 1917 y el último hasta la fecha, el de 2013.
«Aunque no lo parezca, el IGN está presente en la vida diaria de las personas. Nuestros mapas son los que emplea como base, por ejemplo, Google Maps», apuntó su responsable regional, Olegario Vaquero, al que acompañó el subdelegado del Gobierno, Ángel Miguel y el respresentante palentino de la entidad cartográfica, Jesús Sáenz.