Pétalos que colorean las calles de Carrión

Rubén Abad
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Más de 500 vecinos se involucran en los preparativos de esta gran fiesta que se traduce en más de un kilómetro de alfombra floral · El Ayuntamiento aporta más de 2.000m2 de serrín

Pétalos que colorean las calles de Carrión

Carrión de los Condes afronta la cuenta atrás para la celebración este domingo de la fiesta del Corpus Christi, una arraigada tradición local donde los auténticos protagonistas son los más de 500 vecinos que se involucran de lleno en la elaboración de una kilométrica alfombra floral que despierta el interés de cientos de personas en cada una de sus ediciones.
Arte efímero con mayúsculas que esconde un laborioso trabajo detrás. Meses de preparativos que dan como resultado espectaculares formas y colores para los que se emplean flores de temporada como son las rosas y los claveles, restos de café donado de manera altruista por los establecimientos hosteleros o césped recién cortado, que el Ayuntamiento la siega a las siete de la mañana para que conserve todas sus propiedades. También arroz molido, sal, harina, cáscara de huevo e incluso serrín teñido, más de 2.000 metros cuadrados en esta edición, el doble que en 2023, que se conserva ya en 25 sacas a la espera del gran día.

Ya en marzo se realizan los diseños que decorarán las calles como paso previo a dibujarlos con tiza en la víspera del Corpus. Con todos los materiales listos, los carrioneses se echan a la calle con los primeros rayos de sol para tenerlo todo a punto. Son horas frenéticas en el que faltan manos en las calles de la ciudad jacobea para tenerlo todo a punto para la procesión, que tiene lugar tras la misa de las 12 horas.

La tradición se remonta al siglo XVII, fecha en la que se establecieron unas ordenanzas municipales en las que se solicitaba a los vecinos que acondicionaran las calles -por aquel entonces de barro- con paja y flores, así como adornar los balcones para el paso de la procesión. Los orígenes de la misma datan del siglo XIV y a la que se incorporó en el siglo XVI una custodia que Antonio de Oro, un mercader enriquecido en América, regaló al pueblo.

TODO EL PUEBLO UNIDO

El alcalde, Luis Miguel Medina, destaca la «implicación de todo el pueblo» y la «fraternidad» que se respira en todas las calles del pueblo. «Sin la aportación de todos, sería imposible sacar adelante esta fiesta tan querida en el pueblo», subraya.

El momento estelar es, sin duda, la procesión, en la que participan los niños que realizan su Primera Comunión, todas las cofradías, la Banda de Música, la Coral Carrionesa, mujeres de la ciudad tocadas con peineta y mantilla y el Carro Triunfante. Todo ello, ambientado con la música de las bandas y corales y con la canción Cantemos al Amor de los Amores.

Una de esas 500 colaboradoras que hacen posible que el Corpus brille en Carrión es Begoña Ibáñez, quien pone en valor el trabajo que desempeñan los carrioneses, cada uno dentro de sus posibilidades. «Es una fiesta que llevamos muy adentro y en la que todos colaboramos. A los niños les encanta y los mayores mantienen la tradición haciendo lo que pueden, desde deshojar flores hasta preparar el chocolat», explica. Un trabajo que les ha hecho conocidos en el mundo entero, gracias también a la implicación de la Asociación de Alfombristas de Carrión.