El aumento de un 22,2% acumulado hasta julio en el repunte del comercio exterior, con ventas sobre todo en países de la UE, se produjo respecto al mismo período de 2023. Aún así, la provincia no ha alcanzado el récord establecido en 2016, cuando se alcanzaron los 2.339 millones de euros.
El factor más relevante en el crecimiento de la capacidad exportadora del tejido productivo se debe de forma especial al sector de la automoción empujado por el capítulo arancelario, ya que aumentó un 24,36% entre enero y julio de 2024 hasta alcanzar los 1.231,2 millones de euros. Esta actividad productiva -pese a que no atraviesa su mejor momento por la subida de materias primas y una lenta adaptación a la electrificación con vehículos menos contaminantes- sigue teniendo un peso específico en la provincia, suponiendo el 68,98% del total de las exportaciones. Además, a ello hay que añadir que esta cifra no incluye otros componentes de la industria auxiliar del automóvil, especialmente los plásticos, eléctricos y electrónicos.
Al margen de la industria del automóvil, la agroalimentaria intenta poco a poco posicionarse como una alternativa y las exportaciones, de galletas y otros productos de pastelería y panadería, sobre todo, sigue creciendo y tuvo, sobrepasado el primer semestre del año, un aumento también destacado de un 9,33% en el período analizado, hasta alcanzar 192,15 millones de euros. Sin embargo, el sector que ha tenido un mayor crecimiento es el de transformados de café, con un aumento del 18,49% hasta superar los 138 millones de euros en ventas.
Un 22,2% más de exportaciones con la automoción a la cabeza - Foto: Óscar NavarroSi se suman las exportaciones de automóviles, de productos elaborados a base de cereales (especialmente galletas) y de los derivados del café en la provincia se alcanza la cifra del 88% de las exportaciones totales, según los datos facilitados desde la Cámara de Comercio de Palencia.
AERONAÚTICA, SECTOR PUJANTE. Aunque los coches, los cereales transformados y el café están cerca de monopolizar las exportaciones palentinas, también hay que destacar varias noticias positivas en exportaciones de otros productos importantes para la provincia. Dentro del sector industrial y de bienes de consumo, se reflejó un espectacular aumento de un 70,88% en las exportaciones de componentes de aeronaútica, ya que se superaron los ocho millones de euros. El sector armamentístico palentino también sufrió un gran aumento del 36,18% derivado de los sucesivos conflictos bélicos.
En el sector agroalimentario destacó también el aumento de exportaciones de pescado y marisco congelado en un 54,48% y, también el de pescado y carne envasada, que aumentaron un 72,34%, gracias fundamentalmente al pulpo envasado. También creció en ventas al exterior el sector lácteo, con un pequeño aumento del 8,6%, gracias fundamentalmente a la elaboración de queso.
Por el contrario, en el sector agroalimentario también se encuentran los peores descensos de exportaciones. Entre ellas, destacó una caída del 18,16% en las exportaciones de los distintos productos derivados del cacao (principalmente bombones y tabletas de chocolate) y de un 15,29% en piensos animales (especialmente para animales acuáticos).
En el sector industrial, también destaca la caída en exportaciones de papel y cartón, con una disminución de un 24,71%, situación parecida a la que vive el del cacao, que ha visto como su materia prima se ha encarecido notablemente en el último año, mientras que el sector del papel y del cartón también ha sufrido subidas de precio, además de la pérdida de potenciales destinos como el de Argelia.
En cuanto a los principales destinos de las exportaciones palentinas, Francia y Bélgica se siguen situando como líderes indiscutibles, gracias a las exportaciones de la industria del automóvil.
No obstante, también se ha puesto de manifiesto la importancia de países como Portugal y Estados Unidos para las exportaciones de galletas de Reino Unido, Alemania o Polonia en el ámbito de las exportaciones de procesados de café e, incluso, de Rusia para el cacao. En cualquiera de los casos, las exportaciones palentinas se dirigieron en el período analizado a 148 países, incluyendo destinos tan remotos como Chad, Uzbekistán, Surinam o Djibouti.
datos autonómicos. Por su parte, el comercio exterior de Castilla y León acumula ya casi 13.000 millones en ventas este año y rompe el récord de exportaciones acumuladas sobre el año anterior que databa del 2008. Así, las exportaciones que acumula Castilla y León desde enero de este año son cada casi tantas como las totalizadas en 2021. Los tres puntales sobre los que se asienta la mejor racha exportadora de la historia de Castilla y León son la automoción, que acumula casi 5.000 millones; las semimanufacturas, con 3.660 millones; y la agroalimentación, con 2.200.
El único récord que todavía se le resiste a la comunidad sigue siendo el de la automoción. Los 8.000 millones de euros que consiguió facturar al extranjero en 2016 se antojan, por el momento, difíciles de alcanzar. No obstante, la proyección actual es que este año este sector despache productos por más de 7.000 millones fuera de nuestras fronteras, algo que no se veía en la Comunidad desde 2017. Todo ello en un contexto en el que las ventas al extranjero del conjunto de España tienen números rojos y acumulan casi dos años de caída lastradas por los malos resultados de Cataluña, Madrid y País Vasco.
«Hemos realizado109 planes individuales de empresas en comercio exterior en 5 años»
El responsable de asesoramiento en internacialización de la Cámara de Comercio, Fernando Torrejón, detalló a DP que, tras iniciar la actividad en 2019, se ha trabajado con 109 empresas elaborando planes individualizados. «También recibimos entre 30 y 40 consultas anuales sin hacer un plan como tal. Así, si alguien quiere exportar chocolate a Alemania, por ejemplo, y se le informa sobre posibles competidores o los precios que se mueven»
En cuanto a la captacióm de mercados en otros países, explicó que entre las empresas medias y grandes hay mucha concienciación. «Prácticamente todas se internacionalizan y el problema está en las pequeñas, las de menos de 20 trabajadores, y con ellas hacemos la mayor parte del trabajo. Vender en otros países, supone, además, diversificarse, ya que si el mercado nacional falla, las mercantiles que trabajan solo en él lo tendrían muy difícil para sobrevivir», dijo.
Como mercado más adecuado para pymes y micropymes la Cámara recomienda la UE. «Al final no hay trámites adicionales. Es decir, lo único necesario es adaptar el etiquetado. Luego, si de da el caso de venta de maquinaria agrícola, se les dirige a Ucrania, Bielorrusia y los mercados del este al contar con un terreno y cultivos similares y existir menos competencia», aseveró. Asimismo, Fernando Torrejón destacó como mercado emergente el de Estonia, el país más rico de los bálticos. «Está muy cerca de Finlandia, que tiene la renta más alta de la UE, y su capacidad de compra es muy grande. No es que esté desabastecido, pero los importadores se ven un poco abandonados en las ferias a las que acuden», arguyó.