El Ayuntamiento de Palencia ha dado orden de retirar las guirnaldas que se habían instalado en los entornos peatonales de la Iglesia de San Miguel tras las quejas que comenzaban a circular sobre la idoneidad de ubicar esta iluminación en una zona de marcado carácter patrimonial y los posibles daños que se pudieran ocasionar.
Desde el Consistorio señalaron en un comunicado recogido por Ical que "en ningún momento se había producido daño alguno a las centenarias piedras del templo", y afirman que tanto el Ayuntamiento, de mutuo acuerdo con la Diócesis, ha decidido desmontar las tiras luminosas e instalarlas en algún otro punto de la ciudad.
Desde el equipo de Gobierno apuntaron que su intención era la de dar un mayor realce a una de las celebraciones más populares de la Navidad palentina como es el Bautizo del Niño y cuyo escenario no es otro que todo el perímetro de San Miguel. Este acto, declarado de Interés Turístico Nacional, pretendía ser potenciado por parte del Ayuntamiento, "si bien las quejas que comenzaban a lanzarse por redes y en algunos estamentos han dado al traste con una iniciativa que hubiera sido todo un éxito y que hubiese favorecido también de manera sustancial el tránsito de palentinos y palentinas por la zona durante todas las fechas navideñas", explicaron en el comunicado.
Asimismo, reconocen que, tanto el concejal de Fiestas, Francisco Fernández, como la propia alcaldesa, Miriam Andrés, lamentan haber tenido que tomar esta decisión que hubiera sido del agrado de la inmensa mayoría de vecinos y visitantes, "si bien se da por buena si con ello se contribuye a evitar cualquier tipo de polémica en la ciudad en la que pudieran verse involucradas algunas partes totalmente ajenas a la iniciativa".