Seis personas, cinco hombres y una mujer, de nacionalidades española, marroquí y colombiana y para quienes el fiscal solicita un global de 27 años de prisión y 72.000 euros de multa, serán juzgadas el lunes en la Audiencia Provincial como presuntas responsables de un delito contra la salud pública derivado del tráfico de estupefacientes, fundamentalmente en Aguilar de Campoo.
En el amplio escrito de calificación provisional suscrito por el Ministerio Fiscal considera que los acusados supuestamente se dedicaban a la distribución y venta a terceros de sustancias estupefacientes como heroína, cocaína y speed, entre otras sustancias.
El fiscal, a raíz de la actuación llevada a cabo por el equipo EDOA de la Guardia Civil que encontró indicios de tráfico de drogas en Aguilar de Campoo, pormenoriza minuciosamente y por fechas los movimientos del grupo.
Así las cosas, el Ministerio Público relata cómo en noviembre de 2020 uno de los acusados J.R.P. se acercó a las inmediaciones del instituto Santa María la Real para reunirse con alumnos durante las horas del recreo. Asimismo, se reunía con adolescentes relacionados con el consumo de drogas al final del paseo de La Cascajera. Según el fiscal, en su domicilio, situado en la avenida Villallano número 14 de Aguilar se pudo observar un abundante y constante trasiego de personas. La Guardia Civil pudo averiguar mediante cámaras una supuesta transacción con el conductor de un tercer vehículo.
Tras ser intervenido su teléfono, la Benemérita se pudo averiguar que otro de los acusados M.K.Y. era supuestamente suministrador de sustancias y el fiscal relata cómo en gasta dos ocasiones recogía ciertos envoltorios tras entrevistarse con un tercero. En octubre de 2021 se inició la intervención telefónica de otro de los acusados A.B., a quien en las conversaciones mantenidas con terceros hablaba de posibles ventas de drogas y viajes a Madrid para obtener sustancias y que era socio del acusado M.K.Y.
La Guardia Civil detalla además un viaje realizado por A.B a Durango (Vizcaya) con la finalidad de abastecerse de sustancias para luego repartirlas en Torrelavega, Reinosa y Aguilar de Campoo. Como consecuencia de las conversaciones telefónicas, la investigación deduce que A.B. se desplazaba hasta Durango donde vivía la pareja formada por A.E.G. e I.C.V., también procesados, para comprar cocaína. La mujer era la responsable de un pub de Durango, lugar donde también, al parecer, se distribuía sustancias estupefacientes. El 23 de febrero de 2022 la Guardia Civil efectuó varios registros en domicilios de los procesados, un garaje y un establecimiento público de Aguilar de Campoo. En su conjunto se aprehendieron varios gramos de heroína y marihuana y 23.330 euros en metálico, además de básculas de precisión y bolsas herméticas, cuadernos, agendas y teléfonos móviles.
MÁS REGISTROS. En los otros dos registros llevados a cabo en sendos domicilios de Reinosa la Benemérita consiguió 559,88 gramos de hachís y varios gramos de cocaína, además de utensilios propios utilizados en la distribución de drogas.
En un tercer registro llevado a cabo en Abadiño (Vizcaya) fueron hallados varios gramos de cocaína.
Con todo, el fiscal solicita para A.B. y Á.G.S. seis años de prisión y 12.000 euros de multa para cada uno; para la pareja I.C.V. y A.E.G cuatro años y medio de cárcel y 12.000 euros de multa para cada uno; y para J.R.P. y M.K.Y. la pena de tres años de prisión y 12.000 euros de multa para cada uno.