Al menos 15 palestinos murieron este miércoles en un bombardeo israelí contra el campamento de refugiados del hospital Al Yamin Al Sayed de Yabalia, en el norte de Gaza, zona que en estos días sufre una intensa operación de las fuerzas armadas, en un ataque que dejó también un gran número de heridos, según la Defensa Civil gazatí.
El hospital Al Awda de Yabalia recibió 18 de los heridos del bombardeo, según comunicó su director en funciones, Mohamed Salha, quien asegura que el centro atacado servía de refugio para "miles" de palestinos.
Las incursiones israelíes continuaron en los alrededores de los principales hospitales del norte de Gaza, el Kamal Adwan, el Indonesio, el Al Awda y el propio Al Yamin Al Sayed, sometidos todos a órdenes de evacuación y donde esta mañana los hospitalizados superaban los 300, entre ellos 80 en cuidados intensivos.
"Los heridos pueden superar los 80", añadió Salha, mientras los vídeos difundidos en canales palestinos del lugar muestran el área del campamento destruida y llena de cuerpos calcinados.
La Defensa Civil gazatí informó de que la mayoría de los heridos fueron trasladados al hospital Kamal Adwan de la zona.
Hasta el momento, el Ejército israelí no se ha pronunciado para confirmar o desmentir el bombardeo.
Poco después del ataque los servicios de emergencias recuperaron cinco cadáveres más en Yabalia, estos provenientes de un ataque de la aviación contra la vivienda de una familia identificada como Bahader.
Por su parte, la Media Luna Roja informó de tres muertos y 25 heridos, incluidos niños, contra una escuela que albergaba a personas desplazadas en la zona de Yabalia al Balad.
Asimismo, la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) anunció, tras los ataques, la evacuación de siete de sus escuelas que servían como refugio a personas desplazadas en diferentes zonas del norte de la Frnja de Gaza.
La UNRWA también denunció que la nueva ofensiva israelí le ha obligado a interrumpir "servicios que salvan vidas".
Además, como consecuencia de los ataques, solo quedan operativos dos de los ocho pozos de agua que alberga el campo de refugiados de Yabalia.
Unos 200.000 gazatíes continúan en el campo de refugiados de Yabalia, las fuerzas armadas israelíes mantienen el cerco militar al que dieron inicio hace cuatro días bajo el pretexto de que los milicianos de Hamás vuelven a intentar reagruparse en el norte.
"Las familias siguen atrapadas en el campamento de Jabalia, sin comida ni agua, sin trabajo de los servicios municipales y sin equipos humanitarios (presentes)", dijo este miércoles a EFE una fuente palestina desde esta área.
El Gobierno de Gaza denunció antes del ataque contra el hospital Al Yamin Al Sayed que los ataques en Yabalia han matado ya a al menos 125 personas en los últimos cinco días, en lo que calificaron como una "etapa avanzada de la ocupación (israelí) cometiendo limpieza étnica".
"Todavía hay decenas de cadáveres en el suelo de las calles, las ambulancias y Defensa Civil no han podido llegar", aseguraron las autoridades en un comunicado este miércoles.
A un año del inicio de la intensa ofensiva israelí contra Gaza, más de 42.000 palestinos han muerto en el enclave, de los cuales la mayoría son mujeres y niños, según recuerda diariamente su Ministerio de Sanidad, parte del Gobierno de Hamás en la Franja.
Por otro lado, los heridos superan los 97.700, y el número de cadáveres que siguen entre los escombros del devastado territorio palestino se estiman en unos 10.000, hasta los cuales las ambulancias aún no han podido tener acceso.