Este curso 2024-2025, cuando la Universidad Popular de Palencia cumple 40 años, se mantiene la línea de los anteriores, y es que buena parte de la oferta tiene «mucha aceptación», afirma Concha Lobejón, coordinadora de programas educativos de la UPP, quien añade que «hay propuestas que se hacen de los propios grupos activos y otras que emanan del profesorado. También viene gente de fuera con sugerencias viables y las ponemos en marcha».
«Queremos que sea un curso especial, pero todavía no hemos diseñado lo que queremos hacer para el 40 aniversario. Será una sorpresa», señala, para añadir a renglón seguido respecto a la previsión de alumnos que «siempre estamos en torno a las 3.200-3.300». A esos la UPP suma los de los centros sociales y aulas, más pueblos y centro penitenciario La Moraleja, con lo que «da clase a unas 8.000 personas», comenta.
Si bien es verdad que cada vez son más los jóvenes atraídos por la Universidad Popular, es «una diana» y programan cursos específicos para ellos. Citar el taller que brindará la posibilidad de empezar a componer canciones de música electrónica o urbana con ordenador a partir de la utilización de un programa de audio digital profesional (DAW). El alumno aprenderá a crear beats y melodías con las principales herramientas de producción electrónica como sintetizadores, cajas de ritmos, samplers o efectos VST, también le introducirá en los conceptos básicos para la creación de música digital. Igualmente se aprenderá cómo hacer una sesión de dj híbrida.
El perfil del alumno de la UPP ha cambiado, según explica Concha Lobejón. «En los inicios eran sobre todo mujeres, de unos 45 años de media, y ahora podemos decir que hay muchos hombres y la edad, aunque pueda estar entre los 40-45 años, es múltiple y diversa, de tal modo que tienes a gente en clase con 80 años, pero los hay de 21, 25...», comenta.
El día 3 de octubre comienza el curso en la Universidad Popular de Palencia, UPP, para el que, en su cuadragésimo aniversario, presenta entre sus 143 propuestas más de 40 novedades en Cultura y sociedad, Arte e Historia, Creatividad artística, Escuela de Música, Salud y bienestar, Ciencias y medio ambiente y Tecnologías para la vida cotidiana. Literatura y Aprendizaje de lenguas completan la oferta. Arte e Historia es el que mayor número de novedades incluye.
Señalar que este jueves se cierra el plazo de la matriculación online, el mismo día que la primera fase de la presencial, que se abrió ayer. El 17 se publicará el listado de excluidos y del 18 al 23 se desarrollará la segunda fase de matriculación presencial.
necesidad. El director de la UPP, Cándido Abril, señala respecto del 40 aniversario que, como tal, anima a la reflexión y, sobre todo, a plantearse lo que importa de cara al futuro. «Han sido 40 años de mucha batalla, de mucha lucha, pero ahora mismo lo más importante es pasar de una aventura a una necesidad» y, sobre todo, que «sea consciente de ello la ciudadanía».
«Son 40 años y parece que fue ayer. Ya no se entiende Palencia sin la Universidad Popular, sin un centro de educación a lo largo de la vida, sin que la gente tuviera un espacio como este para estudiar, analizar, debatir, reflexionar, crear en los ámbitos de la cultura, intervenir socialmente», asevera Abril, para quien el reto «tiene que ser, y no sé si es más necesario que nunca, que sea un centro para poner calma, para ver las dificultades que tiene el mundo, pero no solo el lejano, y en todos los ámbitos». En este sentido, cita la sostenibilidad, las relaciones sociales, la intergeneracionalidad, la violencia, las guerras.
«Lo magnífico de estos centros para la educación a lo largo de la vida es intentar cambiar la vida desde ese ámbito, aprender para devolverlo a la propia sociedad, porque si lo que aprendemos nos quedamos con ello en casa no sirve de mucho», expone.
Para su director, la «gran» importancia de la UPP es ser «lugar de encuentro para estudiar, encontrarnos, comunicarnos e intervenir en la sociedad, y todo el mundo», e «irradiar cultura».
«Nos tenemos que sentir muy orgullosos, todo el mundo, porque estas cosas no las soluciona solo uno; tiene que ser la ciudadanía en su interrelación con todo el mundo», concluye.