Formación, empleo y emprendimiento. Estos son los tres pilares sobre los que se sustenta Sembrando futuro: orientación vocacional y profesional, el nuevo proyecto piloto que impulsan conjuntamente la Diputación y la Fundación Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) con el objetivo de retener talento joven en la provincia.
La iniciativa echará a andar el próximo mes de octubre en la comarca del Cerrato con veinte alumnos de cuarto curso de la ESO, al ser este uno de los rincones de la provincia más castigados por la despoblación. Esta primera etapa se desarrollará durante todo el curso académico, hasta junio de 2025, con la idea de extenderse al resto de la provincia progresivamente, con más de 1.200 potenciales estudiantes (1.220 en el curso 2023/24, según datos de la Junta). Las inscripciones se pueden completar online hasta el 30 de septiembre.
El programa combina herramientas digitales basadas en la metodología Ikigai, actividades presenciales y apoyo online. Todo ello permitirá a los estudiantes identificar sus intereses y fortalezas, descubrir opciones educativas y profesionales acordes a sus perfiles, desarrollar habilidades sociales clave para su competitividad y, además, conocer de primera mano las necesidades del tejido empresarial.
Como primer paso, la presidenta de la institución provincial, Ángeles Armisén, firmó el acuerdo de colaboración con su homóloga en EFCL, Rocío Hervella. Este se traduce en una aportación de 10.000 euros con un reto nada desdeñabe: que los jóvenes estudien y se queden en la provincia. De esta manera se pretende contribuir al desarrollo económico local, la lucha contra la despoblación y la sensibilización sobre la realidad empresarial.
Armisén puso de relieve que «cada vez más entidades avanzan junto a la Diputación con el mismo objetivo: que la provincia sea un lugar atractivo y en auge en la que los jóvenes puedan labrar su futuro, con la calidad de vida y los recursos laborales necesarios para establecer su residencia». Fue en este punto donde se refirió a la línea de ayudas de la institución dotada con 100.000 euros para contribuir a los gastos de residencia y transporte de los jóvenes universitarios.
Por otro lado enfatizó en que proyectos como este «demuestran que juntos podemos conseguir objetivos comunes y que establecer alianzas hace que la sociedad mejore». Así se refería a este proyecto piloto que «fomenta arraigo en el territorio, desarrollo en Palencia y se implica con el medio rural» en un acto al que también asistieron la vicepresidenta primera, María José de la Fuente; el diputado de Servicios Sociales, Juan Antonio Obispo; el director general de EFCL, Alberto Guerra; la directora de proyectos, Miriam Fernández; y el delegado de la Junta, José Antonio Rubio, quien ha colaborado también en la difusión desde la Dirección Provincial de Educación.
BENEFICIOS PARA EL ALUMNO
Según desgranaron Armisén y Hervella Sembrando futuro no solo beneficiará a los estudiantes, sino también a los centros educativos y a las familias, proporcionando herramientas y recursos para apoyar la orientación de los jóvenes, prevenir el abandono escolar y fomentar el emprendimiento.
En este sentido, Hervella puso en valor la importancia del acuerdo para el futuro de los jóvenes y el desarrollo de la provincia: «Queremos que tengan todas las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas sobre su futuro», subrayó. A renglón seguido, explicó que el programa «busca no solo orientarles, sino también acercarles a la realidad empresarial, sensibilizándoles sobre las oportunidades que existen en su propia tierra». «Apostar por la juventud es hacerlo por el futuro económico y social de la provincia», añadió.
simismo, aseguró que la colaboración entre instituciones y el sector empresarial es «clave» para crear un entorno donde los jóvenes puedan «crecer y desarrollarse profesionalmente sin abandonar su lugar de origen». «Creemos en un futuro donde puedan construir su vida y su carrera en la provincia, y estamos aquí para ayudarles a hacerlo posible», concluyó.