Es una fórmula política propia de todas las dictaduras. Consiste en borrar de la memoria todo rasgo ideológico, en cualquier formato o modo de expresión, que se considere apartado de las directrices marcadas por las ideas que sustentan la dictadura. Es eso exactamente lo que viene ocurriendo en España en estos últimos años. Cambios de nombre de las calles y plazas de las ciudades, cuya intención no es otra que borrar de la memoria el nombre de aquellas personas consideradas contrarias o ajenas a la ideología gobernante. Esta acción siempre produce molestias a los vecinos, así como gastos superfluos al erario público, sin que se conozcan los beneficios, si es que los hubiere, para los ciudadanos. Los libros de texto de Literatura cancelan intencionadamente los nombres de escritores cuya ideología no coincida con la de los dirigentes políticos, dejando a un lado los valores literarios. Durante la pasada semana ha sido actualidad la cancelación de un futbolista cuyo nombre figura en el frontispicio de un campo de deportes en Getafe. La razón aducida no es otra que unas declaraciones del ex jugador en las que no hacía sino constatar un hecho absolutamente evidente: los equipos de fútbol femenino no generan los mismos beneficios económicos que sus equivalentes masculinos. En consecuencia, no puede haber igualdad en la percepción de sueldos. Los vigilantes de la ortodoxia dominante, que nunca duermen, acaudillados por una estricta gobernanta desde el Ayuntamiento de Getafe al grito de "fuera machistas de nuestra ciudad" salieron unánimes para pedir la cancelación automática del futbolista que tuvo el imperdonable atrevimiento de verbalizar una obviedad. El recinto deportivo borrará el nombre que portaba en aras de la limpieza doctrinal dictada por la ideología gobernante. La alcaldesa de Getafe parece gobernar el municipio al dictado de su pensamiento identitario, olvidando que un alcalde debe atender a las necesidades urbanas y de convivencia de los ciudadanos anteponiendo esta función a su ideología. Sea esta la que sea.