En el año más marcado por la pandemia del Covid, el 2021, la población de la Unión Europea disminuyó en 265.257 personas, un decrecimiento que lideraron las regiones más rurales y despobladas como Castilla y León. Según el estudio que publica el Instituto de Estadística de la Comisión Europea, Eurostat, la reducción debe atribuirse a los cambios naturales acentuados por el coronavirus (más muertes que nacimientos), ya que el saldo migratorio continuó siendo positivo.
La pérdida de población de todas las provincias castellanas y leonesas fue mucho más elevada que la media de la Unión Europea (2,7 por ciento) y que gran parte de las regiones de España. Concretamente, la provincia que redujo en más puntos porcentuales sus habitantes fue Zamora, que llegó al 11,2 por ciento. Después, Palencia (nueve por ciento), León (8,6), Ávila (7,5) y Soria (7,2), según informaIcal.
Por otro lado, la que perdió menos habitantes, aunque también se encuentra muy por encima de la media comunitaria, es Valladolid, que se quedó en una reducción del 4,5 por ciento de habitantes. Entre medias se sitúan el resto: Segovia (4,6), Burgos (5,3) y Salamanca (6,9).
Los datos de las provincias castellanas y leonesas contrastan con las de la Comunidad de Madrid, Islas Baleares y Murcia, que son las únicas autonomías de España que consiguieron tasas positivas. Ibiza y Formentera, en concreto, crecieron 1,7 puntos porcentuales, Mallorca medio punto y Menorca decreció un 0,9. Madrid incrementó su población ligeramente, un 0,2 por ciento, y Murcia, un 0,7.
Más allá de estas comunidades, también registraron porcentajes positivos las provincias de Almería, que llegó a los 0,9 puntos, y Fuerteventura, un 2,7. Las zonas portuguesas fronterizas con Castilla y León también decrecieron demográficamente de forma sustancial, como Beiras y Sierra de la Estrella o Tierras de Trás-os-Montes, que superaron el umbral de los 12 puntos.
En el viejo continente, la mayoría de zonas rurales y con despoblación registraron un decrecimiento poblacional importante. Gran parte de la Francia interior disminuyó entre el 3,5 por ciento y el siete, y algunas zonas más, tal y como destaca Eurostat. El centro y el sur de Italia, el este de Alemania, los Balcanes, Polonia y República Checa también se sitúan entre estas tasas.