Las denuncias por violencia de género en la provincia durante el segundo trimestre del año se han reducido en casi un 21 por ciento en comparación con las del mismo período de 2023. En términos numéricos, 88 causas fueron presentadas en los juzgados de Palencia entre abril y junio, 23 menos que en el ejercicio anterior, cuando la cifra se alzó hasta las 111. Así lo reflejan los datos publicados recientemente por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, órgano dependiente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). 

Estas 88 víctimas, de acuerdo con la población palentina, revelan que 11 de cada 10.000 mujeres en la provincia sufren esta lacra social, una cifra similar a la del conjunto de la comunidad, que se sitúa en 11,9; y casi ocho puntos por debajo de la media nacional, cuya tasa de víctimas es 18,8 por cada 10.000 mujeres. 

La tendencia nacional muestra una disminución del 1,44% en el número de víctimas durante el último año, si bien los litigios aumentan casi un 5%. 

Todas las denuncias de la provincia fueron presentadas por la propia víctima. En 22 causas se trataba de una mujer extranjera, mientras que en las 66 restantes fueron españolas. Estos procedimientos dejaron en el segundo trimestre a un menor tutelado. De acuerdo con estos datos, uno de cada cuatro procedimientos fue presentado por una extranjera. 

Desde la asociación palentina Diversas en Red aseguran que varias mujeres que acuden a su programa de ayuda para inmigrantes en situación de vulnerabilidad acaban revelando indicios de violencia machista. «Estas personas tienen más dificultad para reconocer que se trata de violencia de género»,  afirma a este periódico la directora del colectivo y experta del programa de violencia contra la mujer, Almudena Bustos. «Desde el área de Psicología de la asociación vas notando ciertas cuestiones, como si tienen miedo, si existe una emergencia de según qué nivel, si ha habido alguna agresión, etcétera. Las personas que lo sabemos podemos detectarlo rápido por los nervios y el estado de tensión», detalla Bustos. 

Respecto al perfil de las mujeres extranjeras que acuden a Diversas en Red, su directora asegura que  son muy «variados», si bien la media de edad podría situarse en los 40 años. «La agresión también puede haber sido cometida por un español, que también se dan bastante casos», asegura. 

Según los datos del Observatorio, se emitieron nueve órdenes de protección y otras medidas solicitadas. Siete de ellas fueron destinadas a mayores de edad (tres españolas y cuatro extranjeras), mientras que las otras dos fueron para menores. 

ENJUICIADOS. En cuanto al número de personas enjuiciadas por todos estos litigios, 25 varones fueron procesados, siendo condenados 24 de ellos (20 con nacionalidad española y cuatro extranjeros). Solamente uno de ellos quedó absuelto.  

A pesar del descenso en el número de víctimas y denuncias, los enjuiciados se han incrementado respecto al segundo trimestre del ejercicio anterior, cuando el número fue 22. De todos ellos, 19 fueron condenados (16 españoles y tres extranjeros) y tres absueltos. 

En diez ocasiones se ha identificado una relación entre la víctima y el denunciado, lo que revela que en el 9% de las denuncias existía un vínculo entre ambas partes. En concreto, esta relación ha sido conyugal en el caso de dos denuncias, afectiva en otras dos, exafectiva en cinco y por parte de un padre o hijo en una. 

PROXIMIDAD A 2021. Durante el segundo trimestre de 2021 se presentaron 72 denuncias por violencia contra la mujer en los juzgados de la capital y la provincia, el mejor dato de los últimos tres años. Cabe señalar que en 2020 la cifra fue todavía menor, con 51 litigios, si bien por aquel entonces la situación estuvo condicionada por la situación de la Covid-19.  

Estas cifras mostraron  que nueve de cada 10.000 mujeres habían sufrido violencia machista.