El asesor principal de Inteligencia Artificial e Innovación en el Goddard Space Flight Center y líder de la Estrategia de Tecnología de la Información de la NASA, Omar Hatamleh, considera que, después de que la Agencia Espacial Europea (ESA) seleccionara a Pablo Álvarez y Sara García, España tiene potencial para tener más astronautas.
"Eso sólo va a aumentar. Los astronautas no van a venir solamente de agencias gubernamentales, van a salir también de compañías privadas. Muchas más personas tendrán la opción de ser astronautas e ir al espacio", ha asegurado Hatamleh en una entrevista a Europa Press, concedida en el marco de la celebración del Dell Technologies Forum de Madrid.
En este punto, el experto de la NASA prevé que el futuro de los viajes que en avión tienen largas duraciones "es ir a la baja órbita terrestre y bajar".
Así, ha explicado que viajes que duran 17 o 18 horas podrían llegar a realizarse "en menos de una hora". "Es un sector que va a cambiar drásticamente y se puede hacer en un futuro no muy lejano. Viajar de un lugar al otro subiendo al espacio y luego aterrizar en la Tierra", ha señalado.
Para el especialista de la NASA, gracias a las agencias espaciales se puede transformar una industria que esté trabajando en robótica, en sensores o en electrónica, entre otras cosas, "y adaptarla para que se pueda aplicar en sistemas aeroespaciales".
"Haciendo eso vas a tener una parte del pastel de esa economía emergente y una agencia espacial puede ser la conductora para coordinar y desarrollar compañías y adaptarlas a que tengan éxito en la industria aeroespacial. Podría crear muchísimo valor económico al país, crear trabajo", ha dicho sobre la utilidad de la Agencia Espacial Española.
Todavía no se ha visto la capacidad que tiene la IA
Respecto al futuro de la Inteligencia Artificial, Hatamleh defiende que actualmente "es un bebé", ya que todavía no se ha empezado a ver la capacidad que tiene la IA.
"Cuanto más avanzamos, vamos a tener cosas incluso mucho más potentes. La IA tendrá una capacidad mucho más amplificada que la que tenemos ahora y estimamos que antes de final de siglo estaremos en una segunda fase de la IA y esta fase empezará a tener también sus propias ventajas pero creará desafíos", ha advertido.
De este modo se ha referido a la Superinteligencia Artificial, un concepto que genera "un poco de miedo" a la gente e incluso la comunidad técnica está "divida y polarizada" al 50% sobre si va a ser buena o mala. "Creo que con regulaciones que tengan sentido vamos a poder controlarla bien y amplificar los aspectos positivos que tiene para mejorar la humanidad", apunta.
La NASA trabaja en distintos temas como la astronomía, el cambio climático y, por su puesto, los viajes al espacio y, en este contexto, podrán bases en la Luna y en Marte, unos trabajos en los que utiliza y utilizará la Inteligencia Artificial.
Por ejemplo, la NASA utiliza esta tecnología para desarrollar materiales nuevos o para la navegación complicada y compleja. "Cuanto más te alejas de la Tierra la señala va a tardar mucho más. En Marte, dependiendo de la órbita, puede tardar 20 minutos en llegar la señal allí y 20 minutos en regresar", ha explicado Hatamleh.
Por ello, un sistema que esté en Marte "tiene que ser completamente autónomo utilizando IA". "Vamos a mandar sistemas antes de que lleguen las personas. Cuando hay un error, el algoritmo de IA lo arregla", ha comentado el experto en tecnología.
También tiene utilidad en aspectos médicos, ya que cuando un astronauta va a distancias muy larga y, por ejemplo, está cansado la IA puede darle consejos o también puede hacer un diagnóstico "muy eficiente" de su estado de salud.
Lo que se inventa para el espacio tiene sus usos en la tierra
"Tiene cosas muy interesantes. Lo bueno es que lo que se inventa para el espacio tiene también usos en la Tierra. Hay una sinergia increíble entre aplicaciones de la Tierra y aplicaciones del espacio", ha postillado el líder de la Estrategia de Tecnología de la Información de la NASA.
Antes de que el ser humano llegue a Marte, la idea de la NASA es ir primero a la Luna, y será esta vez una mujer la que aterrice en el satélite natural de la Tierra. Allí, tendrán bases en las que realizarán investigaciones científicas continuar para amplificar y verificar tecnologías.
"La idea es desarrollar todo en la Luna para la siguiente fase, que es irnos a Marte y explorar ese planeta tan interesante que llevamos muchísimo tiempo viendo. Hemos mandado sondas, pero ahora sería interesante mandar a una persona", precisa Hatamleh.
El experto de la NASA cree que llegar a Marte tendrá un gran impacto en la gente joven, en los estudiantes. "Si tienes una misión que va a Marte y los jóvenes lo están viendo, les va a interesar estudiar Ingeniería, Matemáticas o Física y eso va a tener un impacto también en la economía y en la educación del futuro", afirma.