El Bono Cultural Joven arrancó su andadura en Palencia con luces y sombras, como reconocen tanto los beneficiarios de los 400 euros como las entidades adheridas a esta promoción. La página web de esta iniciativa del Ministerio de Cultura y Deporte únicamente recoge once entidades palentinas donde los jóvenes pueden gastar la tarjeta económica que reciben, previa solicitud, por cumplir 18 años. La cifra de puntos de venta físicos es superior (algunos son franquicias o varios negocios de la misma empresa), pero la inmensa mayoría se encuentra en la capital. De la provincia, unicamente hay entidades de Villamuriel del Cerrato y Aguilar de Campoo.En el resto del medio rural, nada. Aunque es cierto que es más alta que hace 12 meses, cuando solo había seis establecimientos en Palencia.

De hecho, la baja participación de las entidades es una de las quejas de las personas nacidas en 2004, la primera añada que disfruta de este plan que también se ha aplicado, con sus diferencias, en otros países de Europa como Italia o Francia. «Querría que hubiera habido más negocios, sobre todo enPalencia, que había muy pocas tiendas para ello y había que ir a Valladolid», explica Marta Sánchez, una de las jóvenes que utilizó su tarjeta en los últimos meses. Por su parte, Jimena Arenillas, de la misma quinta, pone un ejemplo concreto de ello. Quiso adquirir unas tarjetas de suscripción a plataformas digitales, pero a orillas del Carrión no pudo hacerlo. «Las compré en Madrid», declara.

Además, tanto los beneficiarios como las entidades adheridas explican que tuvieron que realizar trámites, en algunos casos farragosos y muy lentos, para inscribirse en el BonoCultural Joven, aunque no hay que olvidar que fue la primera edición. «Conseguir darme de alta fue como un triunfo. Hemos tenido que tener paciencia y entiendo que haya empresas y jóvenes que lo dejen pasar por esto», declara Sara Aicua, de Espacio Lector Nobel de Villamuriel de Cerrato. En términos similares se expresa Juan Carlos Maté, de LibreríaAmarilla. «El sistema falló y hubo muchos problemas para que pudiera inscribirme y no me daban soluciones», declara. Javier Margareto, de Cines Palencia, explica que podría agilizarse el trámite de pago, que puede hacerse con una tarjeta física o digital a través del móvil. «Habría que buscar una forma para hacerlo más rápido», expone.

De los 400 euros, pueden gastar hasta un máximo de 100 en productos culturales de soporte físico, idéntica cantidad para consumo digital o en línea y hasta 200 para artes en vivo, patrimonio cultural y artes audiovisuales. Juan Cruz Pascual, de Universonoro y Palencia Sonora, comenta que hubo melómanos que preguntaron cómo pagar las entradas del conocido festival musical de junio a través de esta fórmula (el certamen está adherido. «Había muchas dudas y la gente no sabía exactamente cómo acceder a ello», declara. No habla de cifras totales porque desde el ministerio tampoco les han informado de ello.

LADO POSITIVO. Aún así, nadie duda de que esta ayuda haya sido positiva, ya sea por acercar la cultura a los jóvenes -aunque se hayan producido casos de picaresca al comprar objetos que no eran para ellos- o por cuestiones económicas. «Ha venido por la tienda mucha gente joven de Villamuriel que lo ha aprovechado», comenta Aicua. Por su parte, Maté admite que el bono tiene una repercusión positiva, aunque lamenta que las personas con menos recursos «no están usando» esta herramienta porque no disponen de los medios para solicitarla. De hecho, piensa que esta medida tendría que orientarse hacia ellos y no necesariamente a jóvenes de una edad concreta. «Como está, no la acabo de entender», declara. Margareto explica que por sus negocios se ha pasado bastantes jóvenes de 18 años. «Esperemos que esta idea haya ayudado a que consuman más cultura; todo lo que sea promover cultura entre los jóvenes creo que es bueno», asevera.

Entre los beneficiarios, el joven Jaime Cancho destaca que ha podido ir a conciertos y comprar lo que quería. De forma parecida se expresa Sánchez, a quien le parece positiva esta concesión.Por último, Arenillas comenta que le parece «una idea genial» el uso de un incentivo como el Bono Cultural que permita a los jóvenes disfrutar de más espectáculos y libros sin tener que estar pendientes de la cartera.  En cambio, Enrique Villalba admite que es una buena medida para esta generación, pero cree que «se podía haber dedicado al fomento del empleo joven».

6.000 operaciones por 187.000 euros

La entrada al festival Boombastic en Asturias, varios videojuegos, libros de todo tipo, sesiones de cine en el Ortega y el Avenida y suscripciones a Netflix yMovistar+ son algunos de los productos que los 854 beneficiarios palentinos del BonoCultural Joven han adquirido en las 6.007 operaciones registradas hasta octubre por el Ministerio de Cultura y Deporte. En total, el dinero gastado asciende a 187.652,5 euros, el 54,9% del montante provincial de 341.600 euros. 
El plazo para gastar la tarjeta es de un año a contar desde que se activa, por lo que aún hay jóvenes que disponen de dinero para sus gastos. Por secciones, el ministerio no dispone de datos provincializados, pero a modo orientativo, desde Madrid explican que, enCastilla y León, el 23,89% se ha destinado a productos digitales, el 48,6% a artes vivas y el 27,6%, a productos físicos.

BUENA OPORTUNIDAD. Por otro lado, con la experiencia que da haber dispuesto de 400 euros para cultura, cuatro de los palentinos nacidos en 2005 recomiendan a los paisanos más jóvenes que ellos que soliciten el BonoCultural, que también permite, si está adherida al programa la entidad que ofrece el producto, el acceso a museos, exposiciones y musicales; la suscripción a periódicos, revistas y otras publicaciones y la compra de partituras e incluso, aunque ya no se utilicen mucho, adquirir CD, DVD o Blu-ray. 

«Creo que los que lo no solicitaron desaprovecharon una gran oportunidad. En verano se podían hacer planes que lo incluían, como ir al cine», subraya Marta Sánchez. Por su parte,Enrique Villalba declara que gracias a esta propuesta ha podido comprar cinco libros y dos entradas de festival.«Y todavía me quedan los cien euros de consumo digital», comenta.
Una opinión similar tiene Jimena Arenillas, quien señala que «la gente que ha tenido el bono y no lo ha aprovechado lo ha malgastado y ha desaprovechado una gran oportunidad, aunque fuese solo para regalar un libro a algún familiar o conocido».

El 75,92% de los palentinos nacidos en 2005 pidió su tarjeta

Los 990 palentinos que vieron por primera vez la luz en 2005 y que reclamaron sus 400 euros para gastar en cultura (de un total de 1.304) elevaron el porcentaje de solicitud del BonoCultural Joven hasta el 75,92%.Es el porcentaje más alto de Castilla y León, por delante de Burgos (74,58% con 2.458 peticiones) y Valladolid (74,43% con 3.706), según los primeros datos provisionales facilitados por el Ministerio de Cultura y Deporte, que aún tiene que completar la revisión de la documentación aportada. 

En el resto de provincias de Castilla y León, el porcentaje sobre posibles beneficiarios y número de solicitudes registradas fue el siguiente: Ávila, 63,33% con 950 solicitudes; León, 67,96% con 2.467; Salamanca, 70,28% con 2.072; Segovia, 60,30% con 957; Soria, 68,71% con 549; y Zamora, 66,31% con 803. La suma absoluta de las nueve provincias asciende a 14.952, lo que equivale al 70,35% de los dieciochoañeros de la región. Además, el dato relativo provincial palentino es el más alto de los registrados en España y es diez puntos superior al nacional (65,14%). En total, de las 501.373 personas con derecho a este bono, 326.579 realizaron el trámite que exigía la Administración Central del Estado. La cuantía que podrán gastar los jóvenes palentinos ascenderá a 396.000 euros, mientras que en Castilla y León se elevará hasta los 5,98 millones de euros.

En esta segunda edición, la totalidad de las inscripciones se ha tramitado por vía digital, a través de la página www.bonoculturajoven.gob.es entre el 13 de junio y el 31 de octubre, incluyendo la ampliación de un mes con el objetivo de fomentar y facilitar la máxima participación de los jóvenes en el programa. 

Tras ser registradas y firmadas, cada una de estas solicitudes es revisada y sometida al proceso de control individualizado de subvenciones del Estado, por lo que la cifra final de beneficiarios podría sufrir alguna variación. Correos, entidad encargada del soporte bancario del Bono Cultural Joven, ya inició el pasado 14 de septiembre el envío de las tarjetas virtuales y físicas a los jóvenes beneficiarios. Desde ese momento, las tarjetas se están emitiendo de forma progresiva hasta alcanzar el total de bonos concedidos. Una vez activado el Bono Cultural Joven, los beneficiarios tienen un año para hacer uso de la tarjeta desde la fecha de concesión.