«El Gobierno aprueba la reforma del mercado laboral para acabar con la precariedad y la temporalidad». Ese es el titular de la nota de prensa que publicaron desde el Ejecutivo tras aprobar el Real Decreto-ley de la reforma laboral a finales de 2021. En febrero del año siguiente llegó la polémica convalidación en el Congreso de los Diputados por un solo voto de diferencia de una norma «en la que el contrato ordinario es el contrato indefinido» -así aparece escrito en la información oficial de La Moncloa-, pero que en Palencia, realmente, este sigue siendo una amplia minoría.
Como muestra, algunos ejemplos. En septiembre (los últimos datos publicados por el Servicio Público de Empleo Estatal, SEPE), solo el 16,49% de los contratos firmados en la provincia (1.130 de 6.852) no tenían escrita la fecha de caducidad. Y esta no es ninguna excepción. Tras la ratificación legislativa en las Cortes Generales, hubo meses en los que se superó el 20% de acuerdos indefinidos entre empresa y trabajador, registrándose el pico más alto en febrero de 2023 con un 25,34%. Pero desde entonces, el porcentaje palentino osciló siempre entre el 10 y el 20%. En lo que llevamos de año, el dato es del 14,97%.
Es cierto que las cifras de contratos indefinidos aumentaron en la provincia tras el cambio legislativo -en octubre de 2021 el dato era 4,95% y en noviembre de ese mismo ejercicio, 7,68% (por poner dos datos)-, pero se partía de una base muy cercana al cero y hoy siguen siendo bajas, más si se compara con los números de Castilla y León, donde también crecieron y habitualmente equivalen a más del 30% del total. En septiembre fueron 24.825 de 68.888, el 36,04% puntos porcentuales más que en Palencia. Esto hace que la provincia siga, y claramente, a la zaga de la región en lo que a contratación indefinida se refiere.
Pero además, tampoco sale Palencia bien parada si se compara con el conjunto de España, donde en el pasado mes hubo hasta un 43,8% de acuerdos laborales sin límite temporal, según los informes oficiales, de los que también se hace eco la Junta de Castilla y León en su página web.
Desde los sindicatos denuncian esta situación y lamentan que Palencia ocupe el último lugar de Castilla y León y esté a la cabeza de España de la temporalidad. El secretario provincial de UGT, Gorka López, achaca esta situación a «las características del mercado laboral de Palencia».
«La mayor parte de los contratos se producen en el sector industrial, donde hay mucha rotación, principalmente en las grandes empresas generadoras de empleo», expone el dirigente ugetista, que aboga por unos contratos laborales que favorezcan una mayor estabilidad. «Hay que seguir reivindicando los contratos indefinidos, que son la causa y la consecuencia que tenemos para poder fijar población», añade López.
producción «lineal». Por su parte, la secretaria provincial de CCOO, Elena Villamediana, culpa de la temporalidad a la industria de la provincia y critica que las factorías palentinas tiren de este contrato a la hora de contratar personal «cuando su producción es lineal a lo largo del año y no fabrican ningún producto que tenga un pico en un determinado momento del año».
«Hay sectores que pueden tener una justificación a la hora de optar por un contrato temporal, pero en Palencia llama la atención que la mayoría vienen de la industria, que tradicionalmente ofrece un empleo más estable», lamenta la máxima responsable de CCOO en Palencia.
Ante esta situación, Villamediana llama la atención al empresariado palentino, «que es el primer y principal responsable de que se esté optando por un tipo de contratación que no es el que marca la reforma laboral, que apuesta por una contratación indefinida que ofrece una estabilidad a los trabajadores y que aquí no se está cumpliendo». «Los empresarios no están asumiendo lo que marca la norma», sentencia la dirigente sindical.
Según fuentes oficiales del SEPE, de los 5.722 contratos temporales firmados en septiembre en la provincia, 5.087 (el 88,9%) estaban vinculados oficialmente a las circunstancias de la producción. Y de ellos, 3.225 (el 63,39%) eran del sector industrial, que superó claramente a los de las empresas de servicio (1.760).
Gorka López: El secretario provincial de UGT aboga por una mayor variación del tejido productivo en la provincia. «Prácticamente el 60% de los desempleados pertenece al sector industrial. Nosotros pedimos que se diversifique el mercado laboral y que no sea tan dependiente de las grandes empresas», manifiesta el dirigente.
Por otro lado, insiste en que laConsejería de Empleo de la Junta de Castilla y León apueste por políticas activas de empleo «para que se puedan reinsertar los parados, sobre todo lo más vulnerables». En este punto hace hincapié en la orientación y en la formación «para cubrir las plazas vacantes que se dicen que existen». «Por un lado tenemos parados y, por otro, hay empresas en determinados sectores que están demandando trabajadores. Ahí hay un problema que las políticas de empleo tienen que ser las que den respuesta a esta situación», concluye.
Elena Villamediana: La secretaria de CCOO Palencia,Elena Villamediana, reclama que la administración esté «vigilante» ante las contrataciones que se producen cada mes. «Cuando hay un puesto de trabajo estructural, las empresas tienen que apostar por un contrato indefinida.El empresario tiene que asumir la filosofía de la reforma laboral. En España se ha ido corrigiendo la temporalidad, como muestra la estadística, pero en Palencia no. Aquí ha mejorado, pero no lo que deseamos ni lo que somos capaces de hacer» asegura.
Además, Villamediana opina que «es importante que entendamos que si no se da estabilidad a las personas trabajadores no se dan las condiciones mínimas dignas de trabajo» y asegura que, cuando se dan estas circunstancias, «no podemos quejarnos de que la gente rechace los empleos.«Desde el empresariado se lanza el mensaje de que no hay trabajadores que quieran ocupar los puestos», comenta tras asegurar que «la estabilidad que una persona demanda es básico».