El graffiti art aparece de nuevo en los muros

Sara Diez
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El nuevo espacio dedicado al arte urbano 'Urban Caneja' se inauguró ayer en la Fundación Díaz-Caneja, coincidiendo con la presentación del mural Magenta sobre Rosa, de Fumantwo

El arte urbano se pone de nuevo de moda en la Fundación Díaz-Caneja. - Foto: ÓSCAR NAVARRO

El nuevo espacio dedicado al arte urbano Urban Caneja se inauguró ayer. Este proyecto de la Fundación Díaz-Caneja y financiado por el Ayuntamiento tiene como objetivo «acercar el arte urbano a la sociedad palentina y dar visibilidad a los diversos artistas del mundo del mural y el grafitti», aseguraron desde la fundación. 

El origen del arte urbano se retoma a los años 60, coincidiendo con el movimiento muralista. En cambio, en los años 90, ese carácter militante perdió fuerza y se concentró en el aspecto individual, como es el caso del Graffiti Art, que se centraba en las firmas de los autores. De este modo, esta técnica evolucionó y surgió el arte urbano.

El espacio Urban Caneja se abrió, en gran parte, gracias al artista Fumantwo. La Fundación Díaz-Caneja le invitó a uno de los Miércoles por la Caneja, una actividad en la que abren el museo a la sociedad civil. En su intervención, Fumantwo reclamó «que hubiera un lugar fijo donde pudiera mostrar el arte urbano», explicaron.

Con este proyecto crean un espacio semi permanente en la Fundación, en el que cada  dos meses invitan a un nuevo artista a que trabaje los muros de la ciudad. Asimismo, «Urbano Caneja es una actividad nueva y que no se estaba trabajando», resaltó Francisco Fernández, concejal de Cultura, Turismo y Festejos.

Por otro lado, el artista palentino apodado como Fumantwo presentó ayer su mural Magenta sobre Rosa, ubicado en la fundación. Para él, «esta oportunidad es una semilla que está plantando para que el arte urbano se prolongue a lo largo de todo el año y para que acudan muchos más artistas», afirmó. 

La obra que presentó ayer el artista consiste en un retrato de una mujer palentina pintada sobre un muro de la asociación. Los colores que empleó fueron tonos magenta sobre rosa, y la silueta está girada 90 grados. De este modo, «tiene una apariencia de paisaje, lo que le aporta una forma más geométrica y le da un toque de abstracción», apuntó.

EL ARTISTA. Empezó a pintar en 2009 y se adentró en el arte urbano porque le parecía «una disciplina   interesante e innovadora», resaltó. Además, este año dará clases de pintura y seguirá con el proyecto.