Si habrá o no escasez de suministro de agua en el medio rural solo el tiempo lo dirá, pero la Diputación se ha puesto ya manos a la obra para minimizar esos contratiempos sobrevenidos propios de la época estival. Y es que un gesto tan sencillo y habitual como abrir el grifo, se convierte en toda una odisea en algunos pueblos de la provincia en los meses centrales del año, cuando el censo aumenta y el recurso escasea.
De esta manera, en su constante preocupación por garantizar el suministro del líquido elemento a todos los habitantes de la provincia, la institución provincial vuelve a convocar las ayudas a ayuntamientos, juntas vecinales y mancomunidades para el suministro con cisternas para localidades en situación de desabastecimiento. La dotación económica inicial asciende a 60.000 euros, ampliables a otros 100.000 en caso de necesidad. Es decir, la partida contemplada en el presupuesto se eleva hasta los 160.000 euros en la presente anualidad.
Esta convocatoria de ayudas tiene como objetivo cooperar en los gastos derivados del suministro, mediante cisternas, de agua potable a la población para el consumo humano en aquellas localidades que lo precisen por problemas de abastecimiento.
Estas situaciones se dan, recuerdan desde el palacio de la calle Burgos, con carácter «puntual». Se debe, según explican a períodos de sequía que merman los recursos hídricos, fugas o averías en las acometidas o la red, mala calidad o insalubridad del agua o picos temporales de consumo. Asimismo, se incluyen episodios en los que las entidades locales acuden a los camiones cisterna como remedio urgente y eficaz para que la población no carezca de este servicio básico de competencia municipal.
Así, serán subvencionables los gastos derivados del transporte del suministro de agua para consumo humano mediante cisternas que no deberá superar los 200 litros por habitante y día. Igualmente, incluye, los gastos ocasionados por la adquisición de agua mineral embotellada cuando se trate de un problema de contaminación en las fuentes o acuíferos con agua calificada o apta para el consumo. En este caso, será subvencionable una dotación de hasta dos litros por habitante y día de agua mineral embotellada.
El plazo para la presentación de solicitudes permanecerá abierto hasta el 3 septiembre. Y es que, si bien habitualmente este se cierra el 31 de agosto, este año cae en sábado y el lunes 2 es festivo en la capital (San Antolín).
La cuantía concedida para cada una de las localidades beneficiarias no será superior al 80 por ciento de los gastos ocasionados, con un importe máximo de 25.000 euros por solicitante.
En 2023 la Diputación concedió un total de 22 ayudas por 67.567 euros a ayuntamientos, juntas vecinales y mancomunidades para cubrir el 30 por ciento de los gastos del suministro de agua potable con cisternas. De las 22 ayudas, diecisiete correspondieron a ayuntamientos, dos a juntas vecinales y tres ayudas a la mancomunidad Valle del Pisuerga.
La actuación se integra en la medida estratégica 10 Renovación de los sistemas de abastecimiento y depuración de aguas en el medio rural del Plan de Acción de la Agenda Rural.