Música, juegos y convivencia fueron los tres pilares sobre los que se sustentó el acto de bienvenida a personas refugiadas organizado ayer por la Plataforma de acogida, un colectivo integrado por varias organizaciones y formaciones como Izquierda Unida, Podemos, Comisiones Obreras o la Universidad Popular, amén de la colaboración de los trabajadores del centro San Juan de Dios.
El objetivo de esta cita, que tuvo lugar en el frontón municipal de Eras de Santa Marina, fue el de subrayar la idea de construir la Palencia del futuro en conjunto con las personas migrantes, tal y como expuso a este periódico Juan Gascón, coordinador regional de Izquierda Unida y uno de los organizadores de la iniciativa. «Creemos que es interesante que haya intercambio entre la gente de Palencia y los que han venido de muchos otros países del mundo», aseguró.
Bajo este prisma, la jornada comenzó con un intercambio de experiencias, tanto de aquellos que recientemente habían llegado a la capital como por parte de quienes, «sin haber nacido aquí, tienen una visión de lo que es ser palentinos». «Escuchar historias de gente que ha pasado por lo mismo y cómo han cumplido un sueño nos parece algo positivo», añadió Gascón. En este punto, mencionar que desde la organización del encuentro se buscó también lanzar un mensaje de igualdad en cuanto a la recepción de las personas extranjeras, independientemente de su color de piel o su lugar de procedencia.
«Al igual que con las personas de Ucrania, queremos que el resto pueda encontrar una recepción propia de quienes reciben a alguien que lo ha pasado mal, que tiene muchas dificultades en sus países para desarrollar sus proyectos de vida y que quieren encontrar una vida mejor», desgranó el coordinador regional, quien, a renglón seguido, subrayó que «da igual que uno haya nacido en un sitio u en otro».
La cita continuó con la práctica de varios deportes, caso del rugby, el frontón o el fútbol sala. La buena compañía, el compañerismo y el carácter humanitario fueron la tónica de una tarde a la que un picoteo y el concierto de Carlos Herrero pusieron el broche de oro.
SUBSAHARIANOS. Cabe recordar que el pasado 7 de agosto llegaron desde Canarias 90 inmigrantes subsaharianos naturales, en su mayoría, de Senegal y Mali. Están alojados en la residencia de los Padres Barnabitas, la que será su casa hasta diciembre gracias a un contrato firmado por San Juan de Dios y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Algunos de ellos estuvieron ayer presentes en Eras de Santa Marina, si bien otros de los voluntarios que participaron en el acto ya llevan instalados varios años en la capital. «Veíamos que en Castilla y León había determiandos partidos que no querían que vinieran personas migrantes y hacían incluso una política de generar odio. Son seres humanos y nosotros somos defensores de los derechos humanos», argumentó Gascón.