Los procuradores socialistas por Palencia, Rubén Illera, Jesús Guerrero y Consolación Pablos han registrado en las Cortes de Castilla y León una iniciativa parlamentaria para que se inste a la Junta a que solicite al Ayuntamiento de la capital la cesión del Colegio de Huérfanas de Ferroviarios con el fin de que, tras su acondicionamiento, albergue las sedes del ITAGRA y del CETECE.

Desde el PSOE se recuerda que a finales del mes de octubre de este año 2024 se tuvo conocimiento de la voluntad de la Junta de Castilla y León de que el Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (CETECE) y el Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario de Castilla y León (ITAGRA) abandonen sus actuales emplazamientos para ser trasladados en un futuro a otras instalaciones. Actualmente, las dependencias de ambas entidades se encuentran situadas en la Capital de Palencia, concretamente en la Avenida de Madrid número 44.

El Centro Tecnológico de Cereales, especializado en el sector de transformación de cereales. se fundó en el año 1998 como una entidad privada sin ánimo de lucro que pretende incidir en el fomento de la formación, la investigación, el desarrollo tecnológico, el incremento de la calidad y la mejora de la competitividad.

El Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario se constituyó en el año 2000 como una asociación privada sin ánimo de lucro. Su actividad se encuentra dirigida a la Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) y formación a empresas, cooperativas, asociaciones e instituciones.

Ambas instituciones son referentes en la investigación, desarrollo e innovación en el ámbito agroalimentario de la Comunidad con una fuerte presencia en el tejido empresarial y productivo de Castilla y León.

Para desarrollar su trabajo, ambas entidades requieren el acceso y utilización de unas instalaciones adecuadas que les permitan realizar su actividad, así como poder incrementar su colaboración con empresas, universidades y otros centros de investigación existentes.

El Colegio de Huérfanas de Ferroviarios, de titularidad del Ayuntamiento de Palencia, es un edificio de un extraordinario valor histórico y arquitectónico. Este inmueble ha poseído un papel distinguido en la histórico social y educativa

de la zona, pero en la actualidad se encuentra en desuso. Es por ello, que supone una pérdida de su potencial como motor de desarrollo económico, formativo y tecnológico.

El colegio formaba parte de una red junto a otros cinco distribuidos por toda España: los de Torremolinos, Ávila, León, Alicante y Madrid. Todos ellos, después de que fueran clausurados, han sido rehabilitados y destinados a distintos fines culturales o sociales, con excepción del ubicado en la capital palentina que sufre un proceso de deterioro y degradación que amenaza con convertirlo en una triste ruina. La Agrupación de Antiguas Alumnas que estudiaron internas en el centro, vienen reivindicando su rehabilitación desde hace varios años.

En estes contexto, la ubicación del Colegio de Huérfanas de Ferroviarios representa una gran oportunidad para estas dos entidades para poder así utilizar un espacio moderno y funcional, que permita promocionar y potenciar la investigación y la transparencia de conocimientos en sectores tan estratégicos como el agroalimentario, contribuyendo, por otra parte, con el desarrollo sostenible, la generación de empleo y la fijación de población en el medio rural.

El traslado de la actividad del CETECE e ITAGRA a este edificio no solo optimizaría el uso de un inmueble histórico, sino que consolidaría a Palencia por su situación estratégica como un referente en innovación agroalimentaria a nivel regional y nacional y posibilitaría la adopción de nuevos proyectos en el ámbito académico, empresarial y tecnológico.