«Elijo lo digital por la rapidez de la industria del cómic»

Julia Rodríguez
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La biblioteca pública de la capital acoge hasta el día 31 de octubre la exposición de planchas de cómic realizadas por el artista palentino Félix Ruiz entre los años 2019 y 2023. Son treinta obras que muestran su trayectoria a lo largo de los último

«Elijo lo digital por la rapidez de la industria del cómic» - Foto: Óscar Navarro

El palentino Félix Ruiz ha expuesto una muestra de unas treinta planchas de cómic en la biblioteca pública de la capital. Estas obras muestran su trabajo más reciente durante y después de la pandemia, entre los años 2019 y 2023,  y podrá visitarse hasta el día 31 de octubre.

¿Cómo empezó su gusto por el mundo del cómic y su trayectoria profesional?

Desde muy pequeño, sentí una fuerte inclinación hacia el cómic. Aunque no tengo estudios formales en Bellas Artes, decidí estudiar Diseño Gráfico e Ilustración en Valladolid, lo que me abrió las puertas para trabajar en agencias de publicidad y en algunas editoriales locales. 

Después de mucho esfuerzo, insistencia y, por supuesto, un poco de suerte, logré ingresar en Marvel, donde estuve aproximadamente siete u ocho años. Durante ese tiempo, trabajé en varios títulos, siendo Lobezno uno de los más destacados, además de colaborar en la adaptación del videojuego Halo. Posteriormente, pasé a trabajar para DC, donde dibujé algunos números de Batman y El Joker. Con el tiempo, también colaboré con editoriales francesas, desarrollando no solo cómics, sino también diseño gráfico editorial y otros proyectos creativos.

¿Qué le inspiró a crear esta exposición en la biblioteca?

 La idea nació de una petición de la biblioteca. Comprendí que era una buena oportunidad para darme a conocer y, sobre todo, para visibilizar el cómic en una ciudad que no lo considera al mismo nivel que la literatura o el cine. Junto a otros compañeros buscamos crear un espacio donde organizar diferentes actividades. Así que propuse no solo hacer la exposición, sino incluir talleres, presentaciones de álbumes y charlas, aprovechando mis contactos en el mundo profesional. Este primer año ha sido modesto, pero esperamos que la actividad, que hemos llamado BANG (Biblioteca Abierta a la Narrativa Gráfica), pueda crecer y establecerse en los próximos años.

¿Cómo seleccionó las planchas que iba a exhibir en la exposición?

Cuando decidí qué trabajos incluir, había quienes me sugerían mostrar mis trabajos de Marvel. Sin embargo, pensé que sería más interesante presentar lo que he estado haciendo recientemente porque ya han pasado unos diez años desde esos proyectos. Quería que la gente viese la evolución de mi trabajo, así que seleccioné obras desarrolladas durante y después de la pandemia. Para mí, esa fue una etapa dura, pero también productiva, ya que continué colaborando con clientes franceses y americanos. La muestra incluye cerca de treinta planchas que reflejan esta evolución.

¿Qué mensaje espera transmitir a los visitantes de la exposición?

Espero que comprendan que ser dibujante de cómic es un trabajo tan válido y serio como cualquier otro. Si bien hay un componente artístico, hay también un enfoque comercial, ya que el objetivo es vender un álbum a un público determinado. En la exposición, los asistentes podrán ver cómo me adapto a diferentes estilos. Animo a los jóvenes que desean dedicarse a este mundo a trabajar duro y ser flexibles ante las exigencias del sector. 

¿Cuál es su proceso creativo al crear un cómic?

Depende del tipo de proyecto. Cuando trabajo en encargos, normalmente recibo un guion de la editorial que ya ha sido filtrado y aprobado. En este caso, la creatividad está más restringida, ya que el guion desglosa lo que sucede en cada viñeta y los diálogos. Sin embargo, siempre tengo la posibilidad de aportar algunas ideas y detalles que puedan enriquecer la narrativa. 

En cambio, cuando se trata de un proyecto personal, la libertad creativa es mucho mayor. Aquí, el único límite es lo que yo mismo puedo imaginar y crear, siempre teniendo en cuenta que el resultado debe ser atractivo para el público.

¿Qué técnicas o herramientas prefiere utilizar en su trabajo?

A lo largo de mi carrera, he trabajado con diferentes técnicas, desde papel y tinta hasta acuarelas y acrílicos. Sin embargo, actualmente me he decantado por el medio digital, principalmente porque la industria exige rapidez y eficacia en los tiempos de entrega. Utilizo una pantalla táctil grande, que me permite un control preciso sobre el trazo y el color. Aunque hay desventajas, como la posibilidad de perder un archivo, los beneficios son claros: la flexibilidad y la facilidad para hacer cambios son incomparables. De todos modos, disfruto del soporte físico y lo reservo para mis proyectos personales y mi tiempo libre.

¿Hay algún autor o cómic que le haya influido a lo largo de los años?

Sin duda, hay muchos. En particular, el cómic americano ha sido una gran influencia para mí, con autores como Bill Sienkiewicz, Howard Chaykin, Jim Starlin y John Byrne. Aunque actualmente también trabajo con editores europeos, la influencia del cómic americano es innegable.

¿Cuáles son las diferencias entre trabajar con personajes establecidos a crear los suyos propios?

Trabajar con personajes de Marvel o DC tiene una repercusión inmediata debido a su popularidad pero también implica presiones de tiempo, ya que el ritmo de producción es rápido y necesitas entregar muchas páginas en poco tiempo. En contraste, crear mis propios personajes me permite un ritmo más tranquilo aunque con menos visibilidad mediática pero puedo disfrutar de proceso creativo.