«No compren agua embotellada porque tenemos la suerte de contar en la ciudad con un agua sanitariamente perfecta». Ese fue el mensaje que la alcaldesa Miriam Andrés, lanzó ayer a los palentinos con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua en la ciudad. Aquona y el Ayuntamiento se unieron bajo el lema Agua para la Paz, para dar a conocer la calidad del agua que brota de los grifos de los palentinos, a la vez que la regidora apeló a un consumo responsable del agua. «No solo hacemos un favor al planeta al reducir los plásticos sino que este bien preciado que empieza a ser de lujo en algunas zonas del país», dijo.
Una cata de aguas y una exposición de la tecnología con la que cuenta Aquona llamaron la atención de multitud de viandantes que ayer por la mañana pasaban por la calle Mayor, a la altura del edificio Villandrando. Hasta allí se desplazaron también el concejal de Medio Ambiente, Antonio Casas, y varios miembros de la Corporación que, junto a la directora de Desarrollo Sostenible de Aquona, Laura de Vega, y el gerente de Aquona en la ciudad, Javier del Sol.
«Tenemos la oportunidad de mostrar a los palentinos la gran calidad del agua que tenemos en Palencia», recalcó Lura de Vega, que también incidió en la importancia de dar a conocer las herramientas que, día a día, se utilizan para hacer posible la gestión eficiente, tecnológica y sostenible del recurso hídrico en la capital por parte de Aquona.
Y es que, tal y como desveló el gerente de Aquona en Palencia, Javier del Sol, el consumo por habitante y día en Palencia se sitúa en los 130 litros de agua, una cifra inferior al consumo medio nacional, que es de unos 150 litros. «Agua que se somete a estrictos controles que permiten que el 75% de los palentinos consuma agua del grifo, tal y como reflejan las últimas encuestas», aseveró.