Nadie duda que el Palencia tiene jugadores de calidad, determinantes, capaces de desatascar el peor atranque. Fue el caso de ayer, los exjugadores del Almazán, traídos por el técnico, Edipo y Víctor Moreno, marcaron los tantos del triunfo ante un Santa Marta que fue mejor en líneas generales. Diego Rojas puso en escena un once con su habitual 4-4-2, con Alberto en la portería; Astudillo y Víctor, en los laterales; Álex y Gianluca en la banda; Sekou y Raúl Vallejo en el pivote y Edipo y Adri Herrera en punta.
Con un dibujo parecido se presentó el Santa Marta, valiente, atrevido y, como siempre, con buen trato de balón. Pronto dio el primer susto con un gol anulado a Chopi por fuera de juego claro. La respuesta no tardó en llegar, en un mano a mano de Edipo ante Del Río, al que respondió el joven guardameta charro con una soberbia intervención.
No tenía un dueño claro el partido, aunque sí dando la sensación el equipo visitante de encontrarse más cómodo en el campo, con más posesión, cuando menos no agobiado. Pero al Palencia CF no le hace falta un ritmo intenso, ni asfixiar al rival para generar ocasiones de gol, dado el arsenal ofensivo que tiene. Y así, casi de la nada, sin excesiva elaboración, llegaba el segundo claro aviso local, con un servicio al primer palo de Edipo que remataba Herrera al palo.
A la tercera no falló. Un balón largo desde la defensa, desmarque en velocidad de Edipo (un lujo para esta categoría) provocando el punta morado un penalti que el dominicano transformó con calidad y dedicatoria al cielo.
Dio un paso al frente el Santa Marta en el arranque del segundo acto, con un Mito más activo. Y fruto de ello llegaba el penalti más que dudoso de Sekou, que el exjugador morado transformaba. Una vez más se demostró que la maldición del ex no es un Mito. El talentoso punta estuvo a punto de marcar el segundo minutos más tarde, enviando el balón por encima del marco de Alberto. Los morados no reaccionaban, quedaron tocados por ese gol. Su ritmo de juego seguía siendo plano y el Santa Marta olió sangre. Tena tuvo el 1-2 en pleno festival visitante.
Era el momento de reaccionar y de dar un giro al partido, tirando de la bancada palentina. Los hermanos Vallejo, Rubén y Mario, entraban al rescate. Cuando menos, se paró la sangría. Poco después llegaba el golazo de Víctor Moreno. Su último servicio antes de ser relevado por lesión. Grandes minutos de Capi y elPalencia, con oficio, mantuvo el marcador ante un gran rival.