La pareja de moda

Juan J. Lahuerta (RFR)
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Los jóvenes talentos Musiala y Wirtz disparan la ilusión en el seno de la selección anfitriona

La pareja de moda

El talento joven llama con ímpetu a la puerta y despierta la ilusión en esta Eurocopa. Una selección potente como la anfitriona Alemania ya tiene a su dúo de moda: Jamal Musiala y Florian Wirtz. Ambos han iniciado su andadura en la competición continental con una exhibición ante Escocia y con una victoria trabajada contra Hungría. Los dos duelos mostraron a dos auténticos 'diablos' que reivindican una demarcación que hasta hace poco estaba en peligro de extinción.

El corsé que se ha puesto el fútbol del siglo XXI, en el que gobierna el estudio exhaustivo y milimétrico de cualquier factor, ya sea propio o del rival, y que no da pie a una excesiva improvisación, puede romperse en este torneo. Al final, el desborde, el clásico arte del juego de la calle en el que prima la imaginación, la pillería, la creatividad y la espontaneidad, puede abrirse paso en una competición que ya ha coronado a sus dos primeros héroes: Musiala y Wirtz.

Insultantemente jóvenes, con 21 años cada uno, fueron, y con permiso de Toni Kroos, los mejores jugadores del choque inaugural. El combinado de Julian Nagelsmann se estrenó con una goleada inédita (5-1) para después certificar su pase a octavos de final contra Hungría, en un duelo en el que Musiala abrió la lata.

La dupla que juegan desde la mediapunta del combinado germano ya ha demostrado que la edad no es un límite que conozcan. Se han hecho imprescindibles en sus clubes, Musiala en el Bayern de Múnich y Wirtz en el Bayer Leverkusen, y ahora destacan como estrellas en Alemania. 

Los dos encajan perfectamente en el perfil de jugadores que muchos entrenadores temen y desean a la vez. Su desparpajo no está reñido con el control que todo técnico desea tener. Pero sí es necesario para romper las normas y hacer que ocurran cosas diferentes. Y Nagelsmann, sin ningún temor, apostó por ellos.

Su decisión no salió nada mal. Colaboraron en muchas de las acciones decisivas del choque. Por ejemplo, en los dos primeros goles del debut: Wirtz abrió el marcador a los 10 minutos con un golpeo desde el borde del área que no pudo atrapar Gunn; y Musiala, no mucho después, fusiló al portero escocés con un gran disparo desde dentro del área. En apenas un cuarto de la primer parte, los dos solucionaron el estreno de Alemania.

Después, siguieron con sus diabluras frente a Hungría, ya que el del Bayern fue el encargado de encarrilar el pase a octavos en su selección. Fueron un incordio constante para sus dos rivales hasta la fecha, desbordados ante las acciones de los jóvenes extremos. Sobre todo por Musiala, más insistente que su compañero. Durante el tiempo que ha estado sobre el terreno de juego, ha desquiciado a los defensores 'magiares' y británicos. Por eso, fue designado por la UEFA como el hombre del partido inaugural. Pero su mejor premio, el de los dos, fue la ovación que se llevaron cuando fueron sustituidos en ese partido.

Aplaudidos hasta la extenuación por la hinchada de la 'Mannschaft', ya son los nuevos ídolos de Alemania, necesitada de alegrías después de una década huérfana de títulos. Pero, de los dos, quien más necesitaba esa ovación era Musiala, que ya había sufrido en sus carnes la decepción. En el pasado Mundial salió trasquilado tras una participación errática.