Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han confirmado este viernes un nuevo "ataque de precisión" sobre Beirut que tenía por objetivo los "cuarteles centrales" del grupo chií Hezbolá, si bien han admitido ya de primeras que estas oficinas estarían "insertadas en edificios residenciales".
El bombardeo ha sacudido la zona de Dahieh, un barrio del sur de la capital libanesa que está considerado un bastión de Hezbolá. Testigos citados por medios libaneses han asegurado que se trata del ataque más potente lanzado por Israel sobre Beirut en estos últimos días y han confirmado la destrucción de varios edificios.
El Ministerio de Salud libanés ha adelantado un primer balance provisional con dos muertos y un total de 76 heridos, si bien las operaciones de retirada de escombros continúan y se prevé que duren para largo, lo que hace temer que "este número de víctimas aumente en las próximas horas".
El portavoz del Ejército, Daniel Hagari, ha justificado el bombardeo sobre el "epicentro del terror de Hezbolá", organización a la que ha acusado de utilizar a civiles libaneses como "escudos humanos" al "construir intencionadamente sus cuarteles bajo edificios residenciales".
"Israel está haciendo lo que haría cualquier Estado soberano del mundo si tuviese a una organización terrorista que busca su destrucción al otro lado de la frontera", ha dicho, en un vídeo en el que ha recordado los ataques lanzados por Hezbolá desde hace casi un año.
Aunque por el momento las autoridades israelíes no han brindado más detalles de la operación, ni tampoco Hezbolá se ha manifestado al tanto a través de sus canales oficiales, fuentes de seguridad consultadas por medios israelíes apuntan a que el principal objetivo del ataque podría haber sido el líder de la milicia, Hasan Nasrallah.
La coordinadora especial de Naciones Unidas para Líbano, Jeanine Hennis, ha denunciado en sus redes sociales el ataque israelí sobre Beirut, un suceso por el cual asegura que en la organización están "profundamente alarmados y preocupados por el posible impacto civil de los masivos ataques".
"La ciudad (Beirut) sigue temblando por el miedo y el pánico generalizados. Todos deben cesar el fuego urgentemente", ha aseverado Hennis en una escueta publicación en su perfil oficial en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
Por su parte, el portavoz de la Secretaría General de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, ha reconocido estar igualmente "alarmado" por lo ocurrido, si bien ha matizado que por el momento no se dispone de más detalles al respecto.
"Cualquiera que vea las imágenes y el humo saliendo de una zona densamente poblada debería estar alarmado, como mínimo", ha manifestado Dujarric en rueda de prensa poco después de conocerse el bombardeo israelí sobre Beirut.